En ningún lugar del mundo se hace una refinería en cuatro años y medio, y con ese costo y de esas dimensiones, presumió, una vez más, el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Agregó en su mañanera de hace unos días:
“Y récord también, en ningún lugar del mundo se está construyendo una obra pública como el Tren Maya y en ningún lugar del mundo se construye un ferrocarril de mil 555 kilómetros en cuatro años y medio, en cinco años, y también con los costos que se está construyendo esa obra.
“No hay en ningún lugar del mundo una obra que esté ocupando tanta fuerza de trabajo. Pero esto lo tengo que decir yo, hasta parece que presumo mucho, ¿no?, que tiro aceite, lo tengo que decir porque ni modo que lo vayan a decir las cadenas de radio, de televisión, los periódicos.
“Que las redes sociales, sí, ahí se habla más, aun cuando hay mucho bots también, mucha manipulación y mucho bots. Pero la ventaja de las redes es que quien tiene un teléfono puede interactuar y el problema en una televisora es que hay una estructura de control y de manipulación, desde los dueños, que tienen intereses, los directivos, los que trabajan como reporteros, los comentaristas, analistas, expertos, las estrellas.
“Se salvan los camarógrafos, fotógrafos y los trabajadores, esos sí. Mi respeto para los trabajadores, porque no es con ellos, las diferencias, es con los machuchones, los de arriba, ¿no?, que son los que…
“Entonces, esa estructura es impenetrable. Ya parece, ¿no?, que un periodista va a tener la libertad, un enviado, una enviada para decir cosas.
“Puede ser incluso que sí se atrevan a hacer un periodismo independiente, profesional, objetivo, pero al llegar la nota al periódico o a la radio o a la televisión, ahí está el departamento de corte y confección.
“Es más, hay casos en donde no sólo le cortan, la agregan utilizando el mismo nombre del periodista y, ni modo, se tiene que aguantar, sí, porque además se necesita el trabajo”.
21/07/2023