*Vigilaremos con lupa al estado 32
La Ciudad de México no es México; es la capital, pero México es un país muy extenso y el norte también cuenta, y cuenta mucho.
Que no se les olvide que Madero era del norte; Villa era del norte; Carranza, Obregón, Calles, y fueron los que hicieron la Revolución.
Y fueron los que hicieron el partido que está en el poder ahorita; o sea, del norte salen cosas muy buenas; a veces también criticadas, En fin.
Pero sí les digo una cosa: que el triunfo de Ruffo en el estado de Baja California cambió la situación política del país, eso nadie lo puede negar. Y aparte, una gran cosa: lo cambió pacíficamente, eso es muy importante. Un cambio democrático en un país latino que es pacífico, verdaderamente es una cosa sorprendente y ahí empezó, en Baja California.
Hay una cosa muy importante: en las discusiones por la Reforma Política del Distrito Federal lo único de que se habló fue de puestos políticos, que si los van a hacer presidentes municipales, que si los regidores, cómo se van a elegir; todas esas situaciones, pero nadie habla del dinero, y el dinero es muy importante, porque como dijo mi antecesor aquí, Ana Lilia Herrera, la Ciudad de México es una ciudad que ha tenido muchos privilegios, muchos.
Y ahorita dijeron que quieren ser un estado como los otros; entonces, van a tener que aceptar ser un estado como todos los demás. Van a tener que empezar a pagar educación y salud, que ustedes no lo pagan.
Otra cosa: estos privilegios que tienen, que les dan más dinero y aparte todas las inversiones que hace la Federación aquí son muy superiores a las que hace en provincia, muy superiores, son los apapachados del sistema, porque todos los del sistema viven aquí y están muy a gustito, aquí hacen toda la cosa política, aquí todo es el poder general, no nada más económico, político, social y cultural.
Realmente la Ciudad de México toda la vida ha sido privilegiada y les voy a ser sinceros, si quieren ser un estado tienen que crecer, tienen que ser como los demás estados y ver que se tienen que tener las mismas reglas para todos y entonces vamos a ver si son suficientes o no son suficientes.
Eso de la capitalidad, pues es cierto, les dan 3 mil millones y a la frontera, que estamos recibiendo a los expulsados del país, nos dan a lo mucho en el estado de Baja California menos de 100 millones de pesos; debo decirles que ahorita hay dos fuentes de ingresos muy grandes aquí en este país: uno, el impuesto de la gasolina que son más de 200 mil millones de pesos, antes había un subsidio que era de 200 mil millones, o sea, en realidad fue un cambio de 400 mil millones de pesos; y la buena voluntad de nuestros paisanos en Estados Unidos, que este año van a mandar 400 mil millones de pesos, que equivalen al presupuesto de los ocho estados más grandes del país.
Entonces, si los capitalinos ya se decidieron por ser estado, pueden tener la seguridad de que los demás estados vamos a estar vigilándolos, no nada más el Estado de México, todos los estados.
Nuestro estado gasta casi todas sus participaciones federales en educación, cómo puede un estado que capta gente de todo el país, que les da participación de su economía, tener esa situación, por eso no tenemos ni quisiera una aduana digna, fíjense, una aduana digna para comunicarnos con los vecinos y para poder exportar mejor.
Parece que se les nubla a los gobernantes al salir allá por Cuautitlán de lo que es el resto del país; entonces por eso voté en contra de esa reforma.