El senador Daniel Ávila Ruiz presentó ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) una denuncia en la cual solicita, se realice una Evaluación sobre el Impacto Ambiental Federal de la empresa Dragon Mart Cancún S.A de C.V.

El legislador explica que el Proyecto se pretende realizar en una superficie de 561.37 hectáreas en la Ciudad de Cancún, municipio de Benito Juárez, estado de Quintana Roo.

El complejo que pretende realizar Dragon Mart consiste en la construcción de un centro comercial que contempla 3,040 locales, 772 viviendas, dos restaurantes Premium, 12 locales comerciales alrededor de los espejos de agua artificiales, oficinas y una Plaza Cultural.

El predio donde se busca ejecutar el proyecto conserva cobertura forestal de al menos 163 hectáreas.

En la denuncia que presenta Ávila Ruiz solicita que la PROFEPA investigue si realmente existe la autorización del Cambio de Uso de Suelo en Terrenos Forestales, (desmonte, remoción y relleno de vegetación de selva baja perennifolia) con maquinaria pesada en el predio en el que se pretende desarrollar el complejo.

Se enfatiza que la empresa Dragon Mart debe someterse a una Evaluación de Impacto Ambiental Federal ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales por tratarse de un desarrollo inmobiliario que afecta un ecosistema costero.

En la denuncia se manifiesta que el Proyecto se ubica casi colindante con el Parque Nacional Arrecife de Puerto Morelos, por lo que la ejecución puede traerle consecuencias graves a los recursos naturales y valores ambientales de éste. En este sentido, resulta procedente que la PROFEPA en términos de las disposiciones legales, le exija a la Empresa desarrolladora el sometimiento a una Evaluación de Impacto Ambiental Federal.

La finalidad de éste procedimiento es que la autoridad ambiental conozca vía la demostración de estudios técnicos y científicos, el posible impacto y daño ambiental que se puede generar con la ejecución de esta obra.

Es importante aclarar que aun cuando la Empresa ya presentó una Manifestación de Impacto Ambiental (realizado por un Prestador de Servicios en Materia de Impacto Ambiental privado) que argumenta que no causará afectaciones al medio ambiente, la realidad es que la Planta Potabilizadora de Agua y la de Tratamiento de Aguas Residuales que se pretende construir puede causar un desequilibrio ecológico en la capacidad de recarga del acuífero, sin tener la certeza clara de cuál será el impacto ecológico.

Por otra parte, la denuncia revela que la desalinización del agua genera residuos de alta peligrosidad para el ambiente, que consiste en aguas de rechazo o salmueras de alto contenido salino, lo que ocasionaría que se descargaran al medio marino y en concreto al Área Natural Protegida Arrecife de Puerto Morelos, que por su naturaleza drenarían al mar con afectaciones de relevancia a los recursos naturales, por ser descargas de proporciones mayores.