El Consejo Nacional del PRD se reunirá el 2 de abril próximo y el consejo estatal el 10 de abril, en menos de dos semanas los perredistas deberán tomar decisiones.
Es probable que el problema se resuelva con una nueva negociación, la izquierda sólo gana tiempo porque sabe bien que es inexorable su división definitiva.
Mientras los plazos se agotan, Marcelo Ebrard y Nueva Izquierda se pronuncian a favor de Encinas Rodríguez, les conviene mostrar unidad porque, si ganan, ganan todos y si pierden, pierde sólo AMLO y con ello se terminarán de debilitar, y en esas condiciones su participación en el 2012 será simbólica.
Sólo entonces se levantará un movimiento ciudadano que se convertirá en el sucesor histórico del PRD y será el nuevo partido-movimiento de la izquierda mexicana, con nuevos líderes rumbo al 2018. Las alianzas non santas no pasan de la semana mayor.