Llegó etiquetado por los reporteros que cubren el GDF como déspota, engreído, sin carisma y fuera de piso en su posición como comunicador en la administración de Marcelo Ebrard… en la ALDF no es la excepción, pues su nombramiento como Coordinador de Comunicación Social no fue bien aceptada y por ello el gremio periodístico que cubre esa “fuente” están haciendo ruido para su destitución… Pronto dichos repudios llegaron a oídos de Alfonso Brito y éste no dudo en programar un desayuno privado con la pandilla de medios selectos que manipulan la ALDF… La estrategia era generar empatía y llegar acuerdos, pero lo que no esperaba Brito es que los reporteros acordarían dejarlo plantado, pues que no piensan ni contestarle el saludo, lo que enfadó a rabiar al funcionario y de coraje cometió el craso error de acusar a varios de ellos s con sus respectivos jefes… ¿Queeeee tal?