En el Estado de México por el momento hay dos frentes, uno de guerra y otro de amor… En el primero la izquierda se divorcia, pues el jefe del gobierno capitalino, Marcelo Ebrard Casaubón, y el PRD en esa entidad, aseguran que no aceptarán que Andrés Manuel López impongan a la senadora Yeidckol Polevnsky como candidata al gobierno mexiquense…
Por lo pronto, la senadora aceptó que no son los tiempos para una imposición y sólo es una propuesta, pero Ebrard Casaubón confía en que toda la oposición, incluido Acción Nacional (PAN) participe con un abanderado común, ¿y quién podría jugar tan contravenido papel? Nada menos que el infalible Juan Ramón de la Fuente… En este contexto, el jefe del gobierno capitalino destapó para la presidencia del PRD nacional al ex gobernador michoacano Lázaro Cárdenas Batel, en lo que parece ser una alianza de Ebrard Casaubón y los Cárdenas para desplazar a AMLO y a los seguidores de Jesús Ortega, quienes controlan el PRD… Y en esta vorágine perredista, el gobernador Enrique Peña Nieto declara listos los preparativos de su boda con Angélica Rivera… Así las cosas, mientras unos políticos se casan, otros se divorcian… ¿O no?...