Aunque parezca vacilada política, en Baja California Sur el PRD recibió una sopa de propio chocolate… ¿Por qué?... Pues porque uno de sus militantes destacados se quitó la camiseta de su partido y aceptó que el PAN lo postulara al gobierno de esa entidad y ganó…

 

Y así pagaron los perredistas lo que hicieron en Guerrero, donde postularon a gobernador a un priísta de hueso colorado y ganó… De esa manera el PAN y el PRD se repartieron las dos gubernaturas y el único que salió perdiendo fue el PRI… ¿Qué más sigue en este juego de tránsfugas?...