Esta es la brutalidad financiera que históricamente se les permitió a los gobernadores de México, pero que se pretende acabar con la reforma que aprobó el Congreso federal en días pasados…
La deuda de entidades y municipios aumentó 115 por ciento en los últimos cinco años, al pasar de 203 mil 70 millones de pesos en 2008, a 436 mil 242 millones a marzo de 2013… De estas toneladas de dinero, la banca les prestó el 62 por ciento; la de desarrollo financió 20.4 por ciento, mientras que emisiones bursátiles, fideicomisos y otros, representaron más de 77 mil millones de pesos, equivalentes al 17.8 por ciento… ¿Ahora la pregunta es cómo y quién pagará ese multimillonario paquete de recursos?... Pues quién más si no el pueblo con la riqueza nacional que se produce diariamente con el esfuerzo de empresarios, obreros y la explotación de los recursos naturales, como el petróleo y los impuestos… Así de sencilla es la explicación…