Dos funcionarios se están volviendo muy incómodos para Miguel Ángel Mancera, jefe de gobierno del Distrito Federal…

Uno es el delegado en Coyoacán Mauricio Toledo y el otro es el director del Instituto de la Vivienda Raymundo Colins Flores, ambos relacionados con maniobras sospechosas… De acuerdo con lo que comienza a trascender, respecto del primer funcionario, Mancera ya dio instrucciones al propietario de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, Manuel Granados, para que construya el mecanismo para llamarlo a cuentas y quitarlo del camino, pues la ciudadanía ya lo etiqueta como el delegado más corrupto… Y por las mismas anda el titular del INVI, solo que en este caso el jefe de gobierno si tiene facultades para cesarlo y en esas anda… ¿Será?...