El ex reportero de los periódicos unomasuno y El Financiero, Martín Ortiz, ha logrado amasar una fortuna que muchos colegas el envidian…

 

Este “periodista” ha estado encargado de la publicidad en Comunicación Social de la Cámara de Diputados, posición que le ha permitido la acaudalada posición que no oculta, al decir de quienes lo conocer de cerca… De este personaje se dicen muchas cosas, algunas ligadas con funcionarios de Cancún, que ya se sabrán… Pero la gota que derramó el vaso en las últimas semanas, es que cuando apareció en su radiante BMW, despertó enojos entre los colaboradores del rancio jefe de Comunicación Social priísta, Miguel López Azuara… En los pasillos del recinto parlamentario se comenta que el ex aseador de calzado León López, eterno secretario particular de López Azuara, y Ana Cristina Pelaez, ex reportera del noticiero estrella de Televisa que ahora conduce Joaquín López Doriga, documentaron los malos manejos de Martín Ortiz, lo que dio lugar a que le pidieran la renuncia… Pero hábil como es, suplicó al diputado Jorge Carlos Ramírez Marín, presidente del órgano parlamentario, que lo conservara en la “chamba” y desde entonces todos los personajes mencionados en este argumento de película están enfrascados en tremenda lucha por el reparto del multimillonario presupuesto que maneja Comunicación Social de este 61 Legislatura de la Cámara de Diputados, con lo que pasará a la historia como una de las más corruptas… ¿O no?...