Si alguien considera que la empresa china que había ganado la licitación para construir el tren medio-bala México-Querétaro se quedará con los brazos cruzados por la revocación que sufrió, están muy equivocados…
Esto porque ya comienzan a circular versiones de las fuertes presiones que ejercen los chinos, en el sentido de que además de la jugosa indemnización que exigirán, buscarán aplicar la misma medicina a los productos mexicanos que se llegan a su país… Y también se dice que esto no le gustó nadita al presidente Enrique Peña Nieto, lo que ha desatado dudas en un sector del gabinete presidencial respecto a la permanencia de Gerardo Ruiz Esparza en la SCT… ¿Será?... Se cruzan apuestas…