En el mundillo político se comenta con énfasis el daño que le hace a la entidad el ¿gobernador? de Michoacán Fausto Vallejo, quien se empeña en seguir en el cargo a pesar de que los médicos le han advertido que con esa terca actitud su vida está en peligro…

Algunos legisladores que saben del asunto consideran que Vallejo se empeña en seguir en la silla con notables fallas, deteriorada salud y no saber cómo sacudirse la versión de que tiene un hijo inmiscuido con los cárteles… Por ello tanto panistas, como perredistas, intentan en corto armar con los priístas una salida de su correligionario del gobierno michoacano, porque las cosas por venir le pueden sacudir su salud… Están a tiempo…