Cada semana se suman decenas de desempleados que ven suspendido el pago del seguro que por ley está obligado a otorgar el jefe de Gobierno del Distrito Federal… El argumento de los empleados de esta área, es que no hay dinero y que es tanta la demanda, que no se sabe cuando se reanudará…
La irritación de quienes ya estaban esperanzados de recibir esta “ayuda” crece y los empleados del área ya no sienten lo duro, sino lo tupido de los insultos de la gente… ¡Aguas, señores perredistas!...