Días antes de que el presidente Felipe Calderón viajara a Washington para reunirse con su colega Barack Obama, nuestro ya afamado Sinforoso, el oso chismoso, difundió un asunto que para todos los medios pasó de noche…
Reveló cual fue el interés del presidente Calderón para conceder la entrevista exclusiva al director del prestigiado periódico El Universal, Roberto Rock Lechón... De acuerdo con las señales que llegaron en esa ocasión, el jefe del Ejecutivo buscaba un medio de difusión a modo para filtrar lo que necesitaba antes de viajar a su encuentro con el presidente Obama... El tema era el embajador de Estados Unidos en México, Carlos Pascual, contra quien arremetió Calderón cuando el entrevistador le hizo la pregunta, a sabiendas que el asunto provocaría los efectos políticos necesarios para plantear lo que llevaba a Washington... El periódico cumplió, Calderón tuvo lo que quería, pero al final de la película, el presidente Calderón recibió un rotundo no de Obama cuando le trató el tema de lo incómodo que resulta Pascual en México… Con esa frustración regresó el presidente mexicano a su país… Ni hablar, no pudo con el diplomático cubano-norteamericano… ¿Qué más pasará de este asunto?... Ya veremos, porque para estas lides diplomáticas la canciller Patricia Espinosa no sirve… ¿O sí?...