El martes pasado el delegado en Cuauhtémoc, Ricardo Monreal Ávila, operó una supuesta limpia de plantones en el Monumento a la Revolución…
Pero grande fue la sorpresa de comerciantes y vecinos de la zona, cuando la misma noche de ese día comenzaron a llegar camiones procedentes de diversos estados para estacionarse en los alrededores de ese perímetro… Para el mediodía del miércoles, el monumento estaba abarrotado de casas de campaña… Cientos de campesinos se apoderaron de lo que fue campamento exclusivo de la CNTE y que ahora es zona de estrategia monrealista… Vaya que Ricardo es un peligro para el DF… ¿O no?...