El hoyo fiscal que desató el gobierno federal con la eliminación de la tenencia y el mal manejo de las finanzas estatales del gobierno de Coahuila, obligó a que ésta entidad federativa fuera la primera en dar marcha atrás sobre la abrogación del Impuesto sobre la Tenencia y Uso de Vehículos, afirmó el diputado local Erasto Ensástiga, presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF).
Explicó que el caso concreto de Coahuila debe ser analizado con detenimiento, pues el mal manejo de las finanzas públicas y el endeudamiento atroz que se registró de 2006 a la fecha es signo de lo que no debe volver a suceder, pues no se trata del dinero del gobierno, sino de los contribuyentes.
Luego de que el gobierno de Coahuila dio a conocer que cobrará un impuesto estatal a la tenencia de vehículos e incrementará el impuesto sobre nóminas para completar su presupuesto de 2012 y amortizar cada año 2 mil 750 millones de pesos de la deuda pública que adquirió con bancos, la cual asciende a 33 mil 800 millones a pagar en 20 años, Ensástiga Santiago subrayó que ello es muestra de que las cosas no se están haciendo bien en el Gobierno federal y que el hoyo fiscal que se dejó por la abrogación de la tenencia finalmente repercutirá en los contribuyentes.
Apuntó que lo anterior revela la grave situación en que Humberto Moreira dejó a la entidad, pues de acuerdo con cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la deuda que registró el gobierno de Coahuila ascendía, en 2006, a 420 millones de pesos, y para 2011, según menciono el tesorero de Coahuila, asciende a 33 mil 800 millones de pesos, es decir, ¡en cinco años se incrementó en más de 80 veces!
El legislador por el PRD destacó que esta situación contrasta con el manejo que el Gobierno del Distrito Federal ha dado a su deuda pública, ya que durante el primer semestre de 2011 el saldo preliminar de la deuda del gobierno capitalino, registró 52 mil 162.4 millones de pesos, cantidad 0.7 por ciento menor, en términos nominales, e inferior 1.0 por ciento en términos reales, respecto a 2010, cuando el saldo de deuda se ubicó en 52 mil 529.5 millones de pesos,
En ese sentido, detalló que mientras el GDF tiene programado erogar 4 mil millones de pesos por servicio de la deuda, y que representa el 3.0% de sus ingresos; el gobierno de Coahuila pagará por servicio de deuda 2 mil 750 millones de pesos pero que representará al menos el 8% de su presupuesto, más de la mitad de los recursos que destina dicha entidad a sus municipios.
Asimismo y al hacer un comparativo de la deuda del Distrito Federal con otras entidades, resaltó que estados como Chiapas incrementó su deuda en 19.9 veces; Tamaulipas en 11.6; Tlaxcala liquidó todos sus adeudos en 2007 y hasta hoy no contrata créditos para financiar su actividad gubernamental.
Para el Estado de Nuevo León, su deuda le representa el 50.8 % de sus ingresos totales; Chihuahua el 33.2 %; Baja California 31.2 % y el Estado de México el 21.7 %. Sin embargo, mientras el DF financia el 53 % de su gasto con recursos fiscales propios, las demás entidades cubren el 70 y hasta 90 % de sus necesidades con recursos de origen federal, de los cuales, el DF transfiere un poco más del 50 %.
En tanto, dijo, la deuda del gobierno federal le representa el 153% de los ingresos totales (sin contemplar los pasivos contingentes).