Guillermo Pimentel Balderas

En conferencia de prensa, los diputados Raúl Nava Vega, coordinador del PVEM en la ALDF, José Alberto Couttolenc Güemez y el secretario general de este instituto político, Samuel Rodríguez Torres, se pronunciaron porque los recursos destinados por las afectaciones al medio ambiente, después una obra, sean utilizados a capricho y antojo de la Secretaría del Medio Ambiente del Gobierno capitalino.

Mencionaron que el Partido Verde Ecologista de México presentó una iniciativa de reformas a la Ley Ambiental del Distrito Federal, precisamente contra del uso discrecional de los recursos por mitigación.

Adelantaron que esta reforma busca que sea aprobada la próxima semana y resaltaron la importancia de esta propuesta que modificaría el artículo 70 de la Ley Ambiental, para establecer que las acciones de compensación por afectar el medio ambiente serán destinadas en su totalidad a programas, actividades y acciones, en el sitio en donde se realizó la obra.

Con esta propuesta, dijeron, se evita que la SMA utilice estos fondos a su conveniencia o para programas que no son prioritarios, como por ejemplo los 600 millones recaudados de 2010 a 2011, que no se ven invertidos en ninguna parte del DF.

Los representantes del Partido Verde señalaron que esta situación ha provocado que los ciudadanos se muestren resentidos por la falta de solución a las afectaciones de su zona.

Además, se desalienta a los empresarios cuyas aportaciones realizadas para la restauración del medio ambiente no se utilizan en el lugar afectado, y por lo tanto se desmotiva las aportaciones futuras.

Por otro lado, recordaron que un caso concreto sobre la mala administración y aplicación de los recursos derivados de las aportaciones por mitigación de los efectos ocasionados por las obras es la Super Vía Poniente.

En el Partido Verde, señalaron, hemos atestiguado como la sociedad se opone a grandes obras con frecuencia, generándose conflictos sociales y políticos, mismos que en algunos casos impiden desarrollar los proyectos. En otras ocasiones, las construcciones se concluyen, pero violaron normas ambientales, existiendo para ese momento daños irreparables.

Afirmaron que la principal preocupación y molestia de los ciudadanos ha sido la falta de información por parte de las autoridades puesto que sin previo aviso comienzan las construcciones, en la mayoría de las ocasiones dañando o desapareciendo parques, jardines, invadiendo incluso áreas naturales protegidas.