La Junta Directiva y el Comité Científico de la Sociedad Latinoamericana de Neuropsicología (Slan) otorgaron la beca Fernando Dalmás a Cristina Aguillón Solís, del noveno semestre de la carrera de Psicología de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Zaragoza, para asistir al XIII Congreso de la Slan en la ciudad de Asunción, Paraguay.

Se le concedió por el trabajo Adaptación del PROLEC-R para la población mexicana hacia la caracterización de la lectura en escolares de 12 años, que forma parte del proyecto de investigación IN304913 titulado “Relación de la memoria audioverbal y metamemoria en la comprensión lectora de niños de primaria”, cuya responsable es Judith Salvador Cruz, académica de esa unidad multidisciplinaria.

La subvención lleva el nombre del neuropsicólogo uruguayo fundador de la Slan y promotor de las primeras jornadas de neuropsicología en el Cono Sur. Tiene por objeto apoyar a jóvenes estudiantes de América Latina para su formación y desarrollo en esta disciplina, con el propósito de fortalecer la investigación, el avance y la difusión del conocimiento en ese campo.

En esta ocasión, la agrupación otorgó cinco becas para estudiantes de Paraguay y cinco para alumnos de otros países de América Latina, cada una con un apoyo económico; Aguillón Solís fue una de las beneficiadas.

Medición

Judith Salvador Cruz, también responsable del Laboratorio de Neuropsicología del Desarrollo, Alteraciones Neurológicas, Psiquiátricas y Rehabilitación de la FES Zaragoza, asesoró la tesis cuyo objetivo fue indagar en los procesos lectores en la población infantil de educación básica, pues se ha demostrado que hay deficiencias en cuanto a la comprensión de textos, que repercuten en el desempeño académico del estudiante desde ese nivel hasta licenciatura.

“Suponemos que este problema tiene origen en la enseñanza de la lectura. Para revisar este fenómeno se adaptó una batería española para medir los procesos lectores en la población infantil denominada PROLEC-R, de la autoría de Fernando Cuetos y colaboradores. Consistió en la revisión de los ítems, a cargo de Judith Salvador Cruz, y se manejaron los mismos criterios del ensayo original para evitar incompatibilidad en el momento de su aplicación”, explicó Aguillón Solís.

El resto del equipo de investigación está formado por Isaí Nevarez, Fernando A. Hernández y Denisse A. Ortiz.

La prueba PROLEC-R se aplicó a 40 niños de 12 años de edad que cursan el sexto grado de primaria. La aportación principal de este estudio fue que se logró caracterizar el proceso de la lectura en los estudiantes de dicho nivel.

Al aplicar la batería se encontró que 80 por ciento lee de manera eficiente, 10 presentó dificultades en la lectura de palabras, en cinco por ciento la automatización de la lectura es lenta, pero no se equivocan al leer y el restante cinco por ciento tuvo problemas en la comprensión. “Esta caracterización nos permite saber por qué los infantes no recuerdan o no entienden lo que leen”, indicó la estudiante de psicología.

Labor preventiva

Para Judith Salvador Cruz el propósito fue conocer qué ocurre con los niños en la lectura y ejecutar una labor preventiva para mejorar sus habilidades lectoras, además de identificar las causas que afectan el desarrollo cognitivo del alumno.

La prueba facilita diferenciar a los niños con dificultades en los procesos lectores de los que no las tienen,3 además, se corroboró que la PROLEC-R es válida y funciona para detectar estos problemas y poder diseñar estrategias de intervención que apoyen a los niños con deficiencias de comprensión lectora.