El 14 de febrero de 1972 México estableció relaciones diplomáticas con China, lo que abrió un nuevo episodio en el vínculo entre ambas naciones. En el marco de la cooperación, se han firmado 60 convenios de colaboración en diversos sectores; las inversiones en actividades productivas llegan a casi 700 millones de dólares, y los intercambios culturales se multiplican.
Para analizar el vínculo, el Centro de Estudios China-México (Cechimex) de la Facultad de Economía (FE) de la UNAM, organizó el Seminario Internacional 40 años de la relación entre México y China. Acuerdos, desencuentros y futuro.
En la inauguración, Francisco Trigo Tavera, secretario de Desarrollo Institucional de esta casa de estudios, celebró la publicación alusiva al encuentro, a cargo de Enrique Dussel Peters, coordinador del Cechimex, que definió como un análisis minucioso de los aspectos económico, político y cultural de las relaciones entre ambas naciones.
En su oportunidad, Leonardo Lomelí, director de la Facultad de Economía, estimó que el vínculo es una oportunidad para impulsar un nuevo curso de desarrollo en México, basado en una agenda internacional más ambiciosa.
En tanto, Dussel Peters destacó la colaboración de la instancia universitaria con la representación diplomática de China en México, la Secretaría de Relaciones Exteriores, el Senado de la República y el Instituto de China de Relaciones Contemporáneas Internacionales, orientada a profundizar el conocimiento estratégico con respecto al gigante asiático.
Zeng Gang, embajador de China en México, dijo que la celebración de cuatro décadas de la relación bilateral representa una oportunidad para repasar los lazos de cooperación y mirar al futuro, a fin de estrechar la que definió como una asociación estratégica.
En la sala Ignacio Chávez del Vivero Alto, Lourdes Aranda Bezaury, subsecretaria de Relaciones Exteriores, consideró que este año es significativo para ese nexo, y confió en consolidar los acercamientos entre ambos países.
Carlos Jiménez Macías, presidente de la Comisión Relaciones Exteriores Asia Pacífico del Senado de la República, consideró como una prioridad la inserción de México en esa región.
Los trabajos
En el arranque de las sesiones del seminario, Efrén Calvo, presidente de la Cámara de Comercio de México en China, subrayó que del total de exportaciones de la potencia a América Latina, el 50 por ciento las absorbe nuestro país, aún sin un tratado de libre comercio.
Jimmy Li, de la Cámara Empresarial China-México, sostuvo que es necesario impulsar el comercio complementario y promover exportaciones de productos mexicanos, especialmente los elaborados por las pequeñas y medianas empresas.
En la mesa Economía, Comercio e Inversión, Carlos Rojas, presidente del Comité México-China del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (COMCE), aseguró que nuestra nación debe negociar un tratado de libre comercio con su contraparte, para generar beneficios mutuos.
A su vez, Alejandra Sánchez Apodaca, coordinadora para Asia de la Unidad de Promoción, Inversiones y Negocios Internacionales de ProMéxico, resaltó que se tiene en común el objetivo de construir un futuro de prosperidad, mediante relaciones comerciales compartidas y de beneficio mutuo. Prueba de ello son los esfuerzos de cámaras, asociaciones, sector público, privado y académico para incrementar y facilitar las oportunidades, lo que promueve el crecimiento de ambos pueblos.
Al respecto, Carlos Zarza, vicepresidente ejecutivo de la Cámara de Comercio y Tecnología México-China, destacó que la opción para establecer negocios fructíferos con el dragón asiático sería producir todo tipo de mercancías en territorio nacional, en conjunto con las empresas chinas, al considerar el crecimiento de la inversión extranjera directa en el país.
Yang Zhimin, del Instituto Latinoamericano de la Academia China de Ciencias Sociales, afirmó que la potencia debe apostar por estrategias tendientes a construir un intercambio comercial armonioso. Para ello, debe institucionalizar las relaciones económicas, incentivar las importaciones de productos mexicanos de alta tecnología y de valor agregado, y establecer fábricas en territorio nacional, a fin de ajustar el modelo actual.
El encuentro también abordó otras temáticas, como La visión de los embajadores; Economía, comercio e inversión; Aspectos culturales; Aprendizaje del chino; Minería, agricultura y medio ambiente, y La relación política binacional.
Además, La experiencia de las entidades federativas y ciudades; Las experiencias de las empresas, y Hacia una historia compartida, actividades a las que concurrieron ex embajadores de México en China, integrantes de diversos organismos de cooperación binacional e instancias culturales, y académicos de diversas instituciones, entre otros.