El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ofrece una exposición inédita en la historia de México, para compartir con el público la belleza, sabiduría y relevancia universal de los códices mexicanos, en el marco de la celebración de los 75 años de vida de la institución y los 50 del Museo Nacional de Antropología.

Los Códices de México, memorias y saberes es el título de la magna muestra que se presenta en la Sala de Exposiciones Temporales del Museo Nacional de Antropología, del 18 de septiembre de 2014 al 11 de enero de 2015, considerando todos los factores para que estas piezas tan importantes del patrimonio cultural de México sean resguardadas y preservadas según los más altos cánones nacionales e internacionales de conservación.

Curada por personal académico especializado del INAH, la exhibición muestra 44 códices que para su conservación permanecen resguardados en la bóveda de seguridad de la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia.

Entre los invaluables documentos que resguarda la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia está la colección de códices, que constituye una de las fuentes más importantes para acercarnos a las culturas antiguas de México.

Son memoria del alto grado de desarrollo cultural, científico y artístico de los pueblos originarios de nuestro país. Representan sistemas complejos de creencias y saberes que abarcan todos los ámbitos de la vida: registros geográficos, históricos, económicos, calendáricos y simbólicos.

Los códices mexicanos contienen y preservan la sabiduría ancestral. La vigencia de estos documentos no se limita al pasado, pues aún hoy las comunidades recurren a ellos como fuente histórica, respaldo legal y símbolo de identidad.

Entre las piezas más significativas se encuentran: la Tira de la Peregrinación, el Códice Martín de la Cruz-Badiano, la Matrícula de Tributos, el Códice Colombino, el Códice Sigüenza, el Códice García Granados, dos libros del Chilam Balam, el Códice Coixtlahuaca, el Códice Huamantla, las Genealogías de Tlaxcala, el Códice Dehesa (de Oaxaca) y el Códice de Huejotzingo, entre otros.

Las obras elaboradas sobre diferentes materiales: amate, piel, fibra de maguey, tela de algodón y papel europeo, se exhiben dentro de un recorrido museográfico organizado en tres universos: Tiempo, Espacio y Poder, que son los cánones de conocimiento expresados en los códices mexicanos.

Para garantizar la conservación de los documentos durante su permanencia en la sala de exhibiciones, las condiciones de iluminación, humedad y temperatura son rigurosamente controladas por restauradores, conservadores, museógrafos e ingenieros del INAH, las 24 horas del día.

Asimismo, las vitrinas que contienen a las obras son herméticas, y en el caso de los dos documentos prehispánicos que se exhiben, los contenedores son anóxicos, lo que significa que ningún agente externo puede ingresar a la vitrina y se asegura su conservación.

Con esta magna exposición, el INAH refrenda su compromiso de difundir el patrimonio cultural del país y brinda un regalo a los ojos del amplio público compartiendo el saber y la belleza plástica de los libros más antiguos de México, en el marco del 50 aniversario del Museo Nacional de Antropología.