Como se ha hecho una costumbre en la Universidad Anáhuac, los Leones de Football Americano han olvidado el resultado del fin de semana anterior. No importando el marcador, el equipo trabaja al mismo ritmo. En su mente no tienen otra cosa más que mejorar en la ejecución enfocados plenamente en los detalles técnicos que los hagan más rápidos y más certeros en sus ataques.
Algo que ha cambiado en este equipo, y que ha ido creando una fuerte cultura de trabajo, es el enfoque en la mejora continua. El equipo no se enfoca en su rival, no piensa en ellos. Los analiza y establece la manera en que saldrá a atacarlos, pero siempre el enfoque es mejorar la ejecución de cada etapa del entrenamiento.
Esta semana ha existido mucho ruido alrededor del equipo. Por un lado se habla de la victoria frente a los Potros de la UAEM; por otro lado se habla del juego del fin de semana frente a los Linces de la UVM CLV. Los Leones tratan con indiferencia todo el eco que se genera detrás de estos temas.
El juego del fin de semana ayudó a quitarle lo monótono a la pretemporada. Los Leones ansiaban jugar y poder demostrar lo mucho que han avanzado. Hoy se ve un equipo más compacto, más atrevido y con más experiencia. El staff definitivamente ha comenzado a explotar al máximo el talento de sus jugadores y se ven con mejor comunicación que en los dos años anteriores.
Sin mayores aspavientos los jugadores siguen buscando la excelencia. Saben que los resultados son solamente producto del trabajo y esfuerzo que den en el campo. Las caras nuevas en el roster del 2013 han venido a darle profundidad a la competitividad interna lo que traerá buena cosecha en los resultados de este año. Sin duda alguna, algo que podrán palpar los seguidores de este gran equipo.