La producción de petróleo cayó de 3.4 millones de barriles diarios, en 2004, a 2.5 millones actualmente y esta caída representa una pérdida de ingresos de 22 mil millones de dólares anuales, lo que equivale a 9 veces el presupuesto anual de la UNAM.

Así lo afirmó la dirigente nacional de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares, Cristina Díaz Salazar, al señalar que durante los últimos años el sector energético mexicano ha mostrado tendencias negativas, pues la producción de petróleo se reduce, mientras que las importaciones de gasolina, gas y petroquímicos crecen.

Y argumentó: “Por ello las reformas estructurales impulsadas por el Ejecutivo federal, sobre todo la energética, son viables porque sabemos que nuestro país tiene una gran riqueza petrolera y si no aprovechamos este potencial, esta riqueza que hoy tenemos, difícilmente vamos a poder competir a nivel internacional y cada vez nos estaremos hundiendo más sin ninguna capacidad de crecimiento”.

Añadió que “México dejó de ser una potencia petrolera, somos los pobres de la OPEP; ahora Irán e Irak producen más que nuestro país, no obstante que nuestra riqueza petrolera es mayor. Ya es tiempo que superemos los atavismos, las inercias y resistencias que han impedido el desarrollo económico de la nación”.

Estamos seguros, insistió, que con la reforma energética México saldrá ganando y por ello debemos los cenopistas de todo el país estar atentos a superar los argumentos falsos de aquellos que pretenden que esta reforma no sea aprobada en el Congreso de la Unión.