México tuvo un aumento en su reserva internacional por 607 millones de dólares, con lo que su saldo al cierre de la última semana del año fue de 163 mil 650 millones de dólares.

La reserva internacional se constituye por: las divisas y el oro propiedad del Banco de México, que se hallen libres de todo gravamen y cuya disponibilidad no esté sujeta a restricción alguna.

Además, por la posición a favor de México con el Fondo Monetario Internacional derivada de las aportaciones efectuadas a dicho organismo.

También se cuentan las divisas provenientes de financiamientos obtenidos con propósito de regulación cambiaria del FMI y otros organismos de cooperación financiera internacional o que agrupen a bancos centrales, de bancos centrales y de otras personas morales extranjeras que ejerzan funciones de autoridad en materia financiera.

No se considerarán las divisas pendientes de recibir por operaciones de compraventa contra moneda nacional, y se deducirán los pasivos del Banco de México en divisas y oro, excepto los que sean a plazo mayor de seis meses al tiempo de hacer el cómputo de la reserva, y los correspondientes a los financiamientos.