La cultura como tema central  y la convivencia ciudadanas para generar comunidad, es el objetivo del Programa Piloto “Conciliadores vecinales” que el GCDMX a través de la Consejería Jurídica y de Servicios Legales puso en marcha en la Delegación Iztapalapa para la resolución pacífica de conflictos y  prevenir la violencia, entre habitantes de  la capital.

 

Al respecto el Consejero Jurídico, José Ramón Amieva Gálvez, explicó que con 400 vecinos capacitados para la resolución pacífica de conflictos y 900 niñas y niños instruidos en Talleres Interactivos de Cultura Ciudadana para prevenir violencias, iniciaron los trabajos para impulsar el respeto y convivencia sana entre vecinos de la Ciudad.

Las acciones emprendidas, insistió, forman parte del  Programa Nacional para la Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia, que en la Capital Social del país se aplica desde la base de la sociedad, la familia, educando, enseñando y capacitando a los niños para crear conciencia del respeto y civilidad, como basamento para alcanzar la convivencia en intereses comunes: vivir mejor.

Amieva Gálvez explicó que las acciones de la CEJUR se realizan con la participación de la Subsecretaría de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Gobernación y en esta ocasión de la Delegación Iztapalapa, factores que permitieron establecer un Centro de Mediación Comunitaria para la atención y orientación, vía telefónica, de mujeres receptoras de violencia, acompañada de asistencia legal, psicológica y nutricional.

La puesta en marcha del Plan Piloto se realizó en las  colonias Desarrollo Urbano Quetzalcóatl, Santa Cruz Meyehualco y Renovación, con un presupuesto de 10 millones de pesos aportado por la instancia federal para la construcción de la segunda etapa de la Fábrica de Artes y Oficios (Faro)  Faro Oriente, en Iztapalapa.