El titular de la Auditoría Superior de la Federación,  ASF, Juan Manuel Portal Martínez, reveló que el Estado está fallando en su papel de regulador de las concesiones de servicios públicos que otorga a particulares.

Dijo que es indispensable establecer mecanismos de control que garanticen a la población la óptima operación de los servicios a cargo de terceros, públicos o privados, que cuentan con concesiones, permisos, autorizaciones, licencias o funciones delegadas.

Un ejemplo de ello, puntualizó, es la necesidad de una eficaz inspección de las casas de juego, para lo cual se debe concluir la conformación de la base de datos que establece el reglamento de la ley Federal de juegos y Sorteos.

En reunión de trabajo con diputados federales, afirmó que la seguridad pública sigue siendo una grave preocupación social que corresponde al Estado resolver, no obstante los esfuerzos en el área de prevención del delito mediante la profesionalización de los cuerpos policiales, la incorporación de tecnologías de información y sistemas de inteligencia, un mejor equipamiento y coordinación a nivel nacional.

La procuración de justicia, agregó, carece de credibilidad pública, lo cual inhibe la denuncia ciudadana e impide tener una idea clara de la magnitud de la actividad delictiva en el país.

Portal Martínez detalló que a nivel federal, la tasa de crecimiento de los ingresos no petroleros es menor que el gasto neto presupuestario, brecha que se compensa con los ingresos petroleros que están en función del nivel internacional del precio del barril, y que, por lo tanto, son volátiles.

Esta situación, advirtió, genera un déficit presupuestario que necesita ser cubierto con deuda pública. Por ello, agregó que es necesaria una reforma fiscal que establezca un esquema tributario que simplifique y eleve los ingresos tributarios no petroleros, con el fin de dar suficiencia al gasto público, reducir el endeudamiento y asegurar la sostentabilidad de la deuda pública.

En otra crítica, dijo que a pesar de que entre las oportunidades de mejora del ingreso, se encuentra el rubro de los gastos fiscales, los cuales no se proyectan adecuadamente, lo que impide cuantificar su impacto en la recaudación como el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios.

Además, precisó, se requiere que en su cálculo se incluya a los subsidios a la gasolina y los estímulos fiscales.

Respecto a los esquemas de apoyo a los precios y tarifas de las gasolinas y el diesel, del gas LP y del consumo de energía eléctrica, que en 2011 significaron un impacto a las finanzas públicas de 280 mil millones de pesos, explicó que estos tendrían que ser revisados a la luz de los beneficios que generen a los consumidores, ponderando su efecto en la inflación.

En relación con los estímulos fiscales, el titular de la ASF considera necesario que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público presente una evaluación integral del impacto de los resultados económicos y sociales en los diferentes sectores que los conforman, a fin de tener un análisis que apoye las decisiones sobre su continuidad o mejora y evitar su opacidad.

Consideró que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) debe vigilar el cumplimiento del decreto mediante el cual se otorgaron beneficios fiscales en materia de Impuesto Sobre la Renta (ISR) a las entidades federativas.

Resaltó que para asegurar la sostenibilidad de las finanzas públicas, se requiere contar con una mayor calidad del gasto, mediante mecanismos como el presupuesto basado en resultados y el sistema de evaluación de desempeño.

Y a fin de contribuir a regular el crecimiento de la deuda local, afirmó que la Comisión Nacional Bancaria y de Valores debe normar el financiamiento que otorgan las instituciones financieras a los gobiernos locales se ajuste a las sanas prácticas bancarias, independientemente de la garantía real sobre participaciones federales.

Entre los distintos proyectos reportados, relató que uno de los de mayor relevancia fue la construcción de la “Estela de Luz”, en donde la ASF asumió el compromiso de llevar a cabo un trabajo técnico escrupuloso y por ello se efectuó un informe integral y simplificado del proceso y resultado.