La UNAM debe desempeñar un papel importante en el impulso de la cultura de los derechos humanos, no sólo en el ámbito universitario, sino en toda la sociedad, afirmó Luis de la Barreda Solórzano, coordinador del Programa Universitario de Derechos Humanos de esta casa de estudios.
En su quehacer cotidiano, la Universidad se ocupa de estudiar los problemas nacionales y, por tanto, debe contribuir a resolverlos en el ámbito de su competencia: investigación, docencia y difusión.
Aunque en la institución existen investigaciones en la materia, es necesario agrupar este trabajo e iniciar proyectos nuevos para hacer más eficiente esta labor, apuntó.
Por ello, refirió, es importante la creación de este nuevo esquema, que toma como base la Conferencia Internacional sobre Seguridad y Justicia en Democracia. Hacia una Política de Estado en los Albores del Tercer Milenio, celebrada el año pasado.
Entre otros aspectos, busca promover áreas de estudio como la seguridad y la justicia en un Estado democrático. De este modo, se llena un hueco importante, sobre todo por tratarse de una conquista reciente, pues “las mujeres y hombres de hoy somos distintos de los de antes de la proclamación de estos derechos”.
Se hará investigación y, al mismo tiempo, se intentará vincular a investigadores de la UNAM, y de otras instituciones, que trabajen el tema, abundó.
Asimismo, se buscará hacer aportaciones a los planes de estudio, y se hará difusión en este ámbito. También, se realizarán indagaciones de interés teórico, “pero no queremos quedarnos sólo en eso, trataremos de hacer análisis que puedan servirle a la sociedad mexicana y contribuyan a resolver los problemas que se enfrentan”.
En atención al génesis del programa, tendrán un papel preponderante las investigaciones sobre seguridad y justicia, porque se trata de un asunto de la mayor importancia, y en el país hay serios problemas vinculados, mencionó.
Se tendrá una relación importante con los programas universitarios de Medio Ambiente, de Estudios de Género, y de Estudios sobre la Ciudad.
También, se harán diagnósticos a partir de los que se obtengan recomendaciones para mejorar la situación en este ámbito.
“Queremos que en unos años este programa sea reconocido en el país y tenga una gran acogida en todos los ámbitos sociales; que logre ser un referente en el terreno académico, social, legislativo y de la función pública. Deseamos que por la labor realizada en los años por venir sea considerado un espacio indispensable para la sociedad mexicana”, concluyó.