Del total de los recursos públicos que tiene el gobierno federal etiquetados en el Presupuesto de Egresos de la Federación, sólo se fiscaliza el 16 por ciento, afirmó la diputada Esthela Damián Peralta, presidenta de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación.
Señaló que en materia de fiscalización no hay avances significativos que permitan adelantar un combate frontal al desvío de recursos o a la corrupción en el servicio público.
“En materia de transparencia y de fiscalización las asignaturas siguen pendientes, no por cuanto al trabajo que desarrolla nuestro órgano técnico, sino en cuanto hacia los resultados en las observaciones reiteradas de cada año”, enfatizó la diputada del PRD.
Destacó que el Senado tiene una reforma pendiente que permitiría fortalecer al Auditoría Superior de la Federación (ASF) y salir con mejores herramientas para fiscalizar a todo aquel que use un recurso público federal.
Asimismo, dijo que es necesario avanzar en los temas de las contralorías ciudadanas, a fin de generar una inercia de vigilancia y supervisión desde la parte de la organización minúscula de la sociedad.
“Mientras la sociedad no se vincule y no se comprometa en estos temas, me parece que no vamos a poder avanzar en el combate a la corrupción”, asdvirtió.
Dijo que a pesar de que esta Legislatura aportó avances en la materia, no se logró la aprobación de un cuerpo legislativo que permitiera un adelanto importante en este rubro.
Señaló que la LXII Legislatura tiene que impulsar la creación de un Tribunal Constitucional que tenga facultades de sanción para todos los entes del país y todo servidor público que no esté haciendo bien su trabajo.
Así como la elaboración de una nueva ley de responsabilidades de servidores públicos, “ya que éste es un ejercicio que al final lo que tú observas no necesariamente corresponde a lo que se vio en funciones, porque tienes muchos resultados, tienes un aparato técnico que fiscaliza, pero también tienes un gobierno federal que no va a poder ser fiscalizado en su totalidad”.
Manifestó que faltan muchas muestras de que los legisladores no solamente piden la fiscalización a los otros órganos, sino que deben ser los primeros en dar y ejercer adecuadamente los recursos.
“La fiscalización es la oportunidad no sólo de fiscalizar lo técnico o lo presupuestal, también es la oportunidad de fiscalizar el desempeño que tenemos cada uno de nosotros con los recursos públicos que ejercemos”.