Claman auxilio
Guillermo Pimentel B.
Médicos mexicanos denunciaron que son sometidos a mecanismos de control político corporativo por parte de José Fernando Torres Roldán, presidente del Consejo Mexicano de Ortopedia y Traumatología AC, con amenazas sobre la estabilidad laboral, futuro profesional y, sobre todo, de las certificaciones en detrimento del desarrollo de la ortopedia y la traumatología mexicana.
Lamentaron que a pesar de los avances en materia de defensa de los derechos labores en México, el Consejo Mexicano de Ortopedia y Traumatología AC, que preside José Manuel Aguilera Zepeda, y el Colegio Mexicano de Ortopedia y Traumatología AC, presidido por José Fernando Torres Roldán, hoy en pleno Siglo XXI, son sometidos a mecanismos de control político corporativo.
A través de un correo electrónico, los profesionistas de la salud explicaron que son amenazados con ser expulsados si no acuden a sus reuniones, asambleas y congresos, porque de lo contrario, no podrán obtener la certificación quinquenal obligatoria.
Señalaron que la única instancia que puede otorgar la certificación es el Consejo Mexicano de Ortopedia y Traumatología AC; sin embargo, para obtener el documento que avala los conocimientos para atender a los pacientes en esa rama, es necesario formar parte del Colegio Mexicano de Ortopedia y Traumatología AC.
Afirman que el monopolio blindado al autodenominado “Colegio”, resulta aún más lesivo para la profesión médica cuando los dirigentes de ese "sindicato" emprenden amenazas y coacciones contra los médicos que no se avienen a sus dictados.
Son actos de corrupción que hoy se replica con entusiasmo desde la presidencia del Colegio que encabeza José Fernando Torres Roldán, quien fue funcionario en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en donde extrañamente fue jubilado de manera anticipada.
Especifican que además este personaje pretende perpetuarse en el control del gremio en asociación con José Manuel Aguilera Zepeda, quien, contrario a los estatutos, el año próximo será ungido de nueva cuenta como presidente del Consejo Mexicano de Ortopedia y Traumatología AC, debido a la manipulación que ha ejercido corporativamente.
Aguilera –agregan- es actualmente y, de modo simultáneo Presidente del Consejo Mexicano de Ortopedia y Traumatología AC, es decir, del órgano que otorga las certificaciones a los ortopedistas.
“La actitud permisiva de las autoridades (de Salud) se ha traducido en prácticas de corrupción --como obligar a los agremiados a renunciar a sus derechos de antigüedad a cambio de la membresía o asambleas restringidas en las que sólo pueden participar sus allegados--, amenazas sobre la estabilidad laboral, futuro profesional de médicos y, sobre todo, manejo político de las certificaciones en detrimento del desarrollo de la ortopedia mexicana”, subrayan en el documento.
Además, puntualizan que estas agrupaciones profesionales ejercen funciones de autoridad que no deben estar en sus manos o que, por lo menos, deberían estar puntual, detallada y debidamente reguladas, para evitar la exclusión inmotivada de médicos talentosos o el entorpecimiento de su labor profesional por razones que nada tienen que ver con su capacidad, sino con las “grillas” del gremio.
Ante esos actos de autoridad y corrupción, los médicos piden a las autoridades correspondientes no tolerar estas conductas, a menos que piensen que obtienen algún beneficio político al incubar el "huevo de la serpiente"; es decir, al permitir que se generen prácticas nocivas y cacicazgos que rememoran al ejercido por la profesora Elba Esther Gordillo en el gremio magisterial.
Para los profesionistas de la salud, un punto central al respecto consiste en desterrar la obligatoriedad que subsiste, aunque no necesariamente de derecho, para que los médicos pertenezcan a alguna de las agrupaciones “oficiales” de manera corporativa. “Debemos dar paso a la efectiva modernidad, a la libertad de trabajo y a la real libertad de asociación”, resalta en su mensaje a los medios.