*Injusto reparto del presupuesto campesino
El diputado federal Federico Ovalle Vaquera consideró urgente generar una agenda legislativa para el campo, a fin de democratizar el gasto público del desarrollo rural, ya que éste se concentra en cinco estados: Sinaloa, Sonora, Baja California, Chihuahua y Tamaulipas.
En su calidad de presidente de la Comisión Especial de Seguimiento a las evaluaciones practicadas a los programas que conforman el Programa Especial Concurrente para el Campo (PEC), señaló que los 300 mil millones de pesos del presupuesto para el campo se concentran en dichos estados. “Tan sólo Tamaulipas gasta 15 veces el presupuesto de Oaxaca; es decir, lo de 15 estados”.
Agregó que el presupuesto para fomento productivo, que es del 8 por ciento del PEC se canaliza a un grupo minúsculo de productores que constituyen el 0.08 por ciento de los productores nacionales. Mientras que 50 mil más, quienes se encuentran en las zonas más pobres, no son beneficiados; entre ellos, los apicultores.
El también secretario de la Comisión de Desarrollo Rural, afirmó que no sólo se trata de la cuestión agroalimentaria, sino de reconocer las regiones y su diversidad, a fin de generar una agenda legislativa que sobreponga los intereses de la nación a los de un grupo.
Ovalle Vaquera advirtió que “existen grandes corporaciones que reciben un presupuesto de alrededor de 6 ó 7 millones de pesos por año, donde aproximadamente 3 mil exportadores se benefician con subsidios que representan la cuenta de un subsector”.
Indicó que la falta de políticas adecuadas para el desarrollo productivo del campo, aunado a fenómenos naturales que han azotado al país, como las sequías, heladas e inundaciones, en donde México perdió 4 millones de su superficie, tan sólo en el 2011, ha provocado escasez de alimentos.
Expresó que debido a que no hay recuperación de los niveles productivos, se incrementa el precio de los productos, como el maíz o actualmente el huevo, lo que significa que se carece de regulación y control por parte de las autoridades.
Ante ello, sugirió aprovechar el potencial de regiones que están subutilizadas, como las del sur sureste, donde según investigaciones, en un periodo de 4 ó 5 años se podrían producir hasta 50 millones de toneladas de maíz.
Asimismo, se requiere innovar, invertir en infraestructura, en preparación de tierras de entidades como Chiapas, Tabasco, Campeche o Veracruz, “lo que haría que dejemos de importar alimentos, por lo menos granos”, sustentó.
En entrevista, añadió que para el Presupuesto de Egresos del 2013 se tiene que crear una partida significativa para garantizar soberanía alimentaria; esto es, invertir para producir maíz, sorgo, trigo y granos básicos.
Advirtió que de no reorientar el presupuesto y crear un nuevo diseño del campo para el país, la situación no se va a resolver. “Debemos aprovechar el potencial productivo, potenciar la asistencia técnica, la capacitación y mejorar las condiciones productivas”, concluyó.