El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP), de la Cámara de Diputados, reveló que para 2016 la inflación general anual del país tendrá un repunte, lo cual dependerá principalmente de que el tipo de cambio registre una depreciación que contamine las expectativas en materia de precios.
A ello, se le podría agregar la posibilidad de “choques de oferta” y que el crecimiento de la actividad económica sea mayor al previsto, destacó el CEFP en el documento “Evolución de la inflación-junio 2015”.
Indicó que por el contrario, entre los efectos que podrían propiciar que el nivel de inflación fuera menor están la posibilidad de un menor dinamismo de la actividad económica al previsto, así como disminuciones adicionales en los precios de los servicios de telecomunicaciones y/o energéticos; a estos factores podría sumarse una apreciación del tipo de cambio.
De acuerdo con el sector privado se prevé que la inflación general anual se establezca en 2.91 por ciento al cierre de 2015 y, posteriormente, se eleve a 3.36 por ciento para finales de 2016; si bien se espera que la inflación se ubique cerca del objetivo en 2015, se anticipa repunte en 2016.
Relató que conforme al último anuncio de política monetaria, el Banco de México señaló que la inflación se ha situado por debajo de 3 por ciento a pesar de la depreciación de la moneda nacional, y que el traspaso del encarecimiento del dólar a los precios ha estado en línea con lo previsto y se ha manifestado, principalmente, en los bienes durables y no ha dado lugar a efectos de segundo orden.
Además, de acuerdo la institución bancaria central, el desempeño de la inflación anual se ha visto apoyada por la contribución, tanto directa como indirecta, de las reducciones de los precios de los energéticos y de las telecomunicaciones.
A este comportamiento se le agregan las condiciones de holgura en el mercado laboral y en la economía en su conjunto debido a que, la actividad económica continuó mostrando un ritmo de crecimiento moderado, por lo que no anticipa presiones generalizadas sobre los precios provenientes de la demanda agregada.
Sin embargo, el CEFP detalló que la Junta de Gobierno de Banxico pronostica que la inflación general se mantenga por debajo de 3 por ciento durante el resto del año y para 2016, estima niveles cercanos al 3 por ciento.
Mencionó que de acuerdo con la Junta de Gobierno del Banco de México, la trayectoria prevista de la inflación está sujeta a una depreciación de la moneda nacional frente al dólar, lo que se podría traducir en un mayor nivel de precios, entre otros riesgos.
En el documento, el CEFP mencionó que el crecimiento mensual de los precios en junio de 2015 obedeció, principalmente, por la mayor dinámica de las mercancías no alimenticias, al menor incremento del costo de los alimentos procesados, la vivienda, otros servicios y los energéticos, lo que fue contrarrestado por la caída en el precio de los productos agropecuarios. La inflación mensual fue de 0.17 por ciento, igual a la que tuvo en el mismo mes de 2014.
En lo que toca a la inflación general anual, bajó al pasar de 3.75 por ciento en junio de 2014 a 2.87 por ciento en el sexto mes de 2015, lo que implicó que se registrara el incremento de precios más bajo desde que se inició la medición de dicha variable (1970).
Igualmente, por tercera vez desde que se estableció la meta de inflación se ubicó por debajo del objetivo y, en lo que va del año, se mantuvo dentro del intervalo de variabilidad establecido por el Banco de México.
En junio, la mayor parte de la inflación provino de su componente subyacente dado que contribuyó 1.78 puntos porcentuales (61.99 por ciento de la inflación general); en tanto que la no subyacente aportó 1.09 puntos porcentuales (38.05 por ciento).