En el marco del Día Internacional de la Mujer, la senadora, Marcela Torres Peimbert, presentó una iniciativa para reformar la Ley Federal del Trabajo con el fin de incluir las figuras de horario flexible y banco de horas, para generar entornos equitativos en beneficio de más de 4 millones de hogares en el país.

Cabe destacar que una de cada cinco mujeres trabajadoras es al mismo tiempo jefa de familia y el único sostén económico de sus familia.

“A través de una jornada laboral flexible se busca beneficiar a ambos géneros, y beneficiar 8 millones de menores de edad, esto si se multiplica a los 4 millones de hogares por el promedio de hijos (2) por familia, y que significaría una mayor cercanía de los pequeños con sus madres y por consiguiente mayor calidad en la convivencia familiar”, explicó Torres Peimbert.

También señaló que se pretende resolver el problema de lactancia materna, mismo que disminuyó a la preocupante cifra de 14% en los últimos años de acuerdo con datos de INEGI.

Respecto a la figura de horario flexible destacó que el trabajador, previo acuerdo con el patrón, podrá elegir entre diferentes intervalos de tiempo para cumplir con la jornada de trabajo, pudiendo cubrirse de manera continua o seccionada durante el día.

La modalidad del banco de horas, dijo permite al trabajador, previo acuerdo con el patrón, elegir qué días y cuántas horas al día va a trabajar, a fin de agotar, en los días que decida, las horas que trabajaría en una semana conforme a la duración de su jornada de trabajo en términos del artículo 61”.

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) destaca que al incluir estas nuevas figuras de cumplimiento de la jornada de trabajo en la actual legislación, se favorece no sólo la productividad de una empresa, sino también favorece la igualdad entre hombres y mujeres.

Lo anterior si se considera que además de una jornada laboral de 8 horas, el 100% de las mujeres realiza trabajo doméstico no remunerado, mientras que solo un tercio de los hombres realizan estas actividades.

“Debemos destacar que con la aprobación de esta iniciativa de ley, se beneficia a ambos géneros, pero particularmente a millones de mujeres trabajadoras que encabezan familias monoparentales, además abona en la solución de problemas como la privación de la relación afectiva con la madre, la incapacidad para desarrollar relaciones humanas con normalidad, así como desapego y distanciamiento de la persona con la sociedad en la que vive.

“Al modificarse la forma en que se cumple la jornada laboral en México, las mujeres que sean madres tendrían el beneficio de contar con espacios de tiempo suficiente para cumplir con la lactancia materna exclusiva, o para estar más tiempo con sus sin afectar su desempeño laboral”, precisó.

Finalmente, dijo que las largas jornadas laborales reducen claramente el tiempo disponible para la vida familiar y en muchos casos demandan trabajo en las noches y fines de semana. Aunque, también reconoció que los trabajadores laboran horas extra para poder generar un aumento de ingreso familiar”, destacó la legisladora.

De 48 millones 823 mil mexicanos que trabajan 18 millones 791 mil son mujeres, es decir el 38.4%.

De 18 millones 791 mil mujeres que trabajan en el país, las que son madres de uno y hasta más de 6 hijos suman 13 millones 853 mil trabajadoras, y representan 73% de la población laboral femenina.

En 2014, el número de madres - jefas de familia se elevó a 3 millones 832 mil personas cuando concluyó 2014.

De los 48 millones 823 mil mexicanos que trabajan 18 millones 791 mil son mujeres, es decir 38.4%. De ellas, las que son madres de uno y hasta más de 6 hijos suman 13 millones 853 mil trabajadoras, es decir 73% de la población laboral femenina.

Más de la mitad de las madres trabajadoras (7 millones 68 mil) tienen uno o dos hijos. Otro 41% (5 millones 696 mil) tiene entre 3 y 5 hijos y hay un 7.3% equivalente a un millón 87 mujeres que declaró tener 6 hijos vivos o más.

El 53% de las mujeres jefas de hogar tienen empleos de baja remuneración en el sector informal, en comparación con solo el 30% de los hombres.

Los hogares monoparentales dirigidos por mujeres se encuentran una desventaja social y económica derivado de esta multiplicidad de tareas que deben cumplir.

Organización Internacional del Trabajo, así como diversos tratados internacionales, han establecido que la jornada laboral mínima debe ser de 40 a 48 horas a la semana aproximadamente; es decir, 8 horas diaras en promedio.