El presidente de la comisión de Energía del Senado de la República, David Penchyna Grub, pasará a la historia como el gran depredador de la industria energética de México, advirtió el senador Manuel Bartlett Díaz, al afirmar que el legislador priísta está sometido a fuerte presión de su partido, por la deplorable misión que tiene de sacar el dictamen que les interesa.
Aquí las palabras textuales del senador Bartlett: “El presidente Penchyna está ordenando una serie de presentaciones, cuyos nombres no aparecen, nada más aparecen las instituciones, y todo el calendario está claramente señalado para recibir a personas que vendrían en ese planteamiento que él hace, que son básicamente instituciones.
“En numerosas ocasiones, le señalamos al presidente Penchyna que lo que teníamos que hacer en la primera sesión de trabajo de la comisión, es definir el método para dictaminar 19 leyes y no nada más tener un calendario de entrevistas; pero que sorpresivamente llegan, se van comiendo los días, llegan a la definición de una fecha fatal para tener el dictamen listo y acudir a unas supuestas sesiones extraordinarias en donde se vería en unos cuantos días el proceso.
“La votación al final, dada nuestra insistencia, que a lo que íbamos era a que se definiera el método para dictaminar y no nada más lo que es lo importante pero es un apoyo de participaciones que, por cierto, quiero decir que analizadas las participaciones que proponen son las mismas que presentaron en su foro en la reforma constitucional, todos a favor de la reforma; y recordarán que nosotros no asistimos a ese foro, por lo mismo, porque estaba totalmente sesgado, amañado. Ahora vuelven a lo mismo. Esa lista que nos proponen son los mismos, en su inmensa mayoría, sin poner nombres.
“La gran trampa es que todo está establecido como si el único objetivo de la Comisión fuera escuchar gentes, tener participaciones y no hacer el dictamen. Se trata de leyes importantes que van a sacudir al país –se los decíamos–, que no se pueden analizar en dos días y que no podemos decir que ya en día tal fatalmente va a estar la Comisión Permanente convocando para que inmediatamente se vea en un periodo extraordinario.
“No obstante a nuestra insistencia, Penchyna puso a votación exclusivamente el programa de participaciones y no puso, literalmente, las fechas para dictaminar. Hizo todo un recorrido en los medios de comunicación, desinformando, diciendo que ya estaba la ruta y que ya estaba la fecha para que en el Periodo Extraordinario del Senado pusiéramos a discusión ya un dictamen que no está ni definido cómo se va a hacer.
“Nosotros queremos que quede claro ante la opinión pública que no es cierto, que mienten cuando dicen que ya está fijada una fecha para tener el dictamen terminado, cuyo proceso no está en el calendario. Ni aceptamos, ni es aceptable que una Comisión reciba instrucciones de coordinadores para que digan: “Y tal día tienen que estar listos, porque ya hay un Periodo Extraordinario”.
“Si no lo aclaramos, y esa es la petición que le hacemos a los medios de comunicación de aquí del Senado, que tanto nos ayudan para informar a la opinión pública; parecería que hubo un acuerdo, que no lo hubo; dice la prensa y las entrevistas de Penchyna eran diciendo “hay ya un pacto, ya se pactó el proceso, que termina tal día”. Y eso es mentira.
“Y consideramos que precipitar el análisis de estas leyes, es una grave irresponsabilidad, porque va a ser, imagínense lo que significa desestructurar todo el sistema energético del país.
“Por ejemplo, decíamos la cuestión de la electricidad; el sistema eléctrico mexicano, que atiende al 99 por ciento de la población, eficientemente, los costos son de Hacienda, no son los costos de producción; que es un sistema central, ese se va a ir privatizando y extranjerizando, ¿cómo se va a hacer?
“Si no analizamos ese procedimiento desde el punto de vista político, social, técnico, podemos meter al país en un desastre. Han ocurrido desastres eléctricos en muchas partes del mundo –en Nueva York, por ejemplo–, precisamente por intervención de particulares que no hacen las inversiones necesarias.
“Entonces, si no lo analizamos, que somos los responsables de que esto se convierta en una operación en ley, estamos haciendo algo verdaderamente irresponsable”.