El Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, presentó este martes la Iniciativa de Ley Federal de Zonas Económicas Especiales, que “permitirá definir espacios geográficos que ofrezcan un entorno favorable para la instalación y desarrollo de empresas e industrias, a partir de incentivos, ventajas competitivas y condiciones de certidumbre para los inversionistas”.
Explicó que una vez que la Iniciativa sea analizada, enriquecida y eventualmente aprobada en el Congreso de la Unión, habrá de proponer las primeras tres Zonas Económicas Especiales en el país:
La del Corredor Industrial Interoceánico, en el Istmo de Tehuantepec, que conectará al Océano Pacífico con el Golfo de México;
La de los municipios de Michoacán y Guerrero que colindan con el Puerto de Lázaro Cárdenas; y
Una Zona Económica Especial en Puerto Chiapas.
El Primer Mandatario señaló que “lo que tienen en común estas tres zonas es que a pesar de su alto potencial productivo y sus evidentes ventajas logísticas, éstas no han sido debidamente aprovechadas. Justamente para revertir esta situación, vamos a impulsar las Zonas Económicas Especiales”.
Dijo que “para obtener resultados diferentes y mejores, debemos romper paradigmas y atrevernos a hacer lo que nunca hemos hecho antes”. Añadió que “proponer una ley de Zonas Económicas Especiales es proponer un nuevo modelo de desarrollo para el sur del país. Es encontrar una manera innovadora y audaz de atraer inversiones, generar empleos y elevar la calidad de vida de sus habitantes”.
“La transformación nacional necesariamente pasa por el impulso al desarrollo del sur del país. Ha llegado el momento de explorar nuevas alternativas; es tiempo de cambiar el modelo de desarrollo del sur del país”, expresó.
Añadió que “tenemos que transitar del asistencialismo insuficiente, que sólo contiene la pobreza, al crecimiento incluyente. Para ello, se requiere de una estrategia integral, efectiva y de largo alcance, que eleve la productividad y promueva las inversiones, así como la generación de empleos de calidad, bien pagados, bien remunerados”.
El Titular del Ejecutivo Federal refirió que el objetivo básico de la Iniciativa, que hoy mismo será enviada a la Cámara de Diputados, es “establecer las bases legales e institucionales que nos permitan crear nuevos polos de desarrollo industrial en regiones rezagadas, pero con un enorme potencial productivo”.
Apuntó que la Iniciativa incorpora las mejores prácticas internacionales “que nos recomendaron académicos, expertos y organismos internacionales”, especialmente el Banco Mundial. En su elaboración, agregó, también se consideraron diversos elementos de otras iniciativas de ley similares, presentadas previamente por distintas fuerzas políticas, y se incluyen las principales propuestas del sector privado, consultadas a través de cámaras empresariales, desarrolladores de parques industriales y empresarios locales, así como de exportadores y empresas globales con operaciones en México.
El Presidente Peña Nieto explicó que conforme a sus características particulares y vocaciones productivas, cada Zona Económica Especial podrá ofrecer:
Beneficios fiscales directos, tanto a la inversión como al empleo;
Un régimen aduanero especial;
Facilidades adicionales para el comercio exterior;
Un marco regulatorio que agilice la apertura de empresas;
Infraestructura suficiente y competitiva, que asegure el abasto de energía y conectividad logística con el resto del país y los mercados internacionales;
También se ofrecerá financiamiento especial a través de la Banca de Desarrollo;
Apoyos a la capacitación laboral y a los procesos de innovación tecnológica; y
Una moderna planeación urbana y desarrollo ordenado de viviendas en el área de influencia.
Precisó que para que las Zonas Económicas Especiales sean exitosas y tengan viabilidad en el largo plazo, la Iniciativa prevé importantes elementos:
PRIMERO: “Se trata de un proyecto de mediano y largo plazos, que trascenderá incluso a esta Administración. De ahí la relevancia de impulsarlo a través de una ley que brinde seguridad y certeza a las inversiones”.
SEGUNDO: “En cada zona habrá una ventanilla única para todos los trámites de Gobierno, mismos que estarán sujetos a una sola jurisdicción”.
TERCERO: “Se establecerán convenios de coordinación entre los distintos órdenes de Gobierno. En ellos, incluirán sus compromisos y obligaciones para instrumentar las zonas de manera ágil y coordinada, así como otras facilidades e incentivos que los gobiernos locales puedan aportar”.
El Primer Mandatario resaltó que para que las Zonas Económicas Especiales tengan éxito es fundamental la armonización del esfuerzo entre los órdenes de Gobierno. “Es importante que tanto el Gobierno Federal, los gobiernos estatales y los gobiernos municipales, aporten a este proyecto, aporten a este esfuerzo, y estén decididos a conjuntar, en alcance a lo que es atribución y competencia de cada orden de Gobierno, para que a través de un esfuerzo compartido podamos darle impulso y materialización a lo que se propone con la creación de la Ley de Zonas Económicas Especiales”, indicó.
CUARTO: “Se contará con instrumentos de planeación y ejecución acordes con las mejores prácticas internacionales. Cada zona quedará claramente delimitada y tendrá un programa de desarrollo de largo plazo para la zona y su área de influencia, así como un plan maestro de desarrollo del área industrial”.
QUINTO: “El proyecto de ley incluye mecanismos que aseguran la transparencia y rendición de cuentas en el desarrollo y la operación de las zonas”.
El Titular del Ejecutivo mencionó que con el objetivo de complementar estos proyectos, el Gobierno de la República también pondrá en marcha algunas otras acciones:
Políticas públicas para fortalecer el capital humano y promover la innovación, junto con universidades públicas y privadas.
Una estrategia de seguridad preventiva y operativa que permita el adecuado tránsito de personas y mercancías desde y hacia las Zonas Económicas Especiales.
También se construirán importantes proyectos de comunicaciones e infraestructura energética, que eleven la competitividad de las Zonas, incluyendo el Gasoducto Transoceánico y el gasoducto de Salina Cruz a Puerto Chiapas, y de aquí a Guatemala.
“Con estos programas y proyectos se creará un entorno positivo para atraer más inversiones generadoras de empleos, para consolidar cadenas globales de alto valor agregado en la región, y para multiplicar la demanda de productos y servicios locales. Esa es la visión, y con ella debemos avanzar”, explicó.
Agregó que en el mundo existen más de tres mil 500 zonas de este tipo. “En aquellas donde se han implementado adecuadamente, los índices de desarrollo y crecimiento económico han aumentado de manera importante”, destacó.
Indicó que para lograr en México un resultado similar, “se diseñó una propuesta de ley responsable, integral y de largo plazo, que nos permitirá crear nuestros propios casos de éxito en el sur del país”.
El Presidente de la República afirmó que “las Zonas Económicas Especiales no son una solución mágica; son un planteamiento serio, innovador y exigente, que busca adoptar experiencias internacionales exitosas para detonar el desarrollo regional y generar condiciones de igualdad y progreso para millones de mexicanos”.
“Estoy consciente de que varios de los beneficios de esta Iniciativa no se alcanzarán a ver en el corto plazo, incluso en esta Administración. Sin embargo, lo que sí nos hemos propuesto es que antes de que concluya este Gobierno se hayan instalado las primeras empresas ancla, aquellas que permitirán generar cadenas de proveedores y nuevos empleos de calidad en las Zonas Económicas Especiales”, subrayó.
“Trabajemos para aprovechar el potencial de las Zonas Económicas Especiales, y con ellas escribamos una historia de éxito y transformación para el sur de México”, concluyó.