La Directora General del Instituto para la Atención de Adultos Mayores en el Distrito Federal, Rosa Icela Rodríguez Velázquez, informó que sólo 35 por ciento de los adultos mayores reciben una pensión contributiva: seguro social, seguridad de los trabajadores del Estado, o de las fuerzas armadas.
Mencionó que el 80 por ciento de las adultas mayores no cuentan con ningún tipo de pensión o jubilación porque se dedicaron al trabajo del hogar.
Enfatizó que la situación de los adultos mayores es difícil, así lo aceptan los organismos nacionales e internacionales dedicados al estudio de los niveles de vida adecuados, en materia de salud, nutrición, vivienda y satisfactores básicos.
En México el esquema real es de pobreza, hambre, enfermedades, falta de ingresos económicos y oportunidades de vida, los cuales conllevan a una baja esperanza de vida de este grupo etario, subrayó la funcionaria.
Por su parte, Fernando Rodríguez Romero, presidente del primer Consejo Nacional de Adultos Mayores Jubilados y Pensionados A.C., dijo que la Cámara de Diputados se interesó en conocer el pliego petitorio de este organismo de recuente creación, cuyo propósito fundamental es defender la seguridad social e impulsarla a través de iniciativas de ley.Adelantó que una de las luchas que empujarán con toda la fuerza social será la abrogación tercera del artículo 109 del pago del Impuesto Sobre la Renta (ISR) a los jubilados.
Precisó que después de un año se aprobó que estarán exentas de pago de este gravamen las pensiones de hasta 15 salarios mínimos, “ya no hasta 25 salarios mínimos como originalmente solicitamos, sin embargo representa un paso hacia adelante en la materia”.
“Entendemos que las cosas no pueden lograrse al 100 por ciento en la primera intención; no obstante fue un gran logro.”
Opinó que debe otorgarse la pensión para todos los mexicanos mayores de 60 años de edad, independientemente de que cuenten con alguna pensión laboral.
Para tal efecto, agregó, se solicita al Poder Legislativo unir esfuerzos sin tintes partidistas o de grupo e impulsen el proyecto de ley de pensiones no contributivas para las personas de 60 años de edad o más.
“Creemos que con las adecuaciones y actualizaciones pertinentes puede surgir lo que tanto necesita la población de adultos mayores desprotegidos de cualquier prestación de seguridad social”.