El hígado graso o esteatosis es una condición que se presenta cuando se comienzan a acumular lípidos en dicha zona. Generalmente es consecuencia de obesidad o problemas con el alcohol. Una usuaria de nuestro foro está padeciendo de esta enfermedad y nos solicitó que le suministráramos información sobre la dieta indicada para este trastorno.

Dieta para el hígado graso o esteatosis Una usuaria de nuestro foro está padeciendo de hígado graso o esteatosis, ese problema que se genera en una persona cuando este órgano tiene la incapacidad de depurar los lípidos de la zona hepática, acumulándose allí como consecuencia. Por eso mismo, nos solicitó información con respecto a la alimentación que debe llevar.

Si bien lo ideal en estos casos es que se haga una dieta equilibrada entre carbohidratos, proteínas y grasas, también es importante que sea seguida de cerca por un médico. Aún así, habitualmente estos son los consejos alimenticios más habituales para quienes padecen de este problema:

La leche de vaca, los quesos fuertes y las grasas animales en general, además del alcohol y el exceso de azúcar y dulces, son los enemigos principales del hígado graso. Hay que suprimirlos para conseguir una mejoría.

Los alimentos ricos en fibra (vegetales y cereales integrales) nos ayudarán a absorber menos grasas y azúcares de la dieta.

Por contrario, los alimentos con mucha fibra, al igual que el pescado azul, las legumbres y algunas semillas (más fibra) y un puñado de frutos secos pueden ayudar, porque además, combaten el colesterol.

No es recomendable ni subir ni bajar de peso muy bruscamente, sino hacerlo en forma gradual.

Tanto antioxidantes, como las vitaminas A, C, E y también el selenio son bienvenidos para que las células no se degeneren.

Siempre es bueno incorporar algunos remedios caseros para el hígado graso en la alimentación habitual. El cardo mariano, el boldo, el diente de león, la zanahoria o el zumo de limón pueden ayudar bastante para depurar la zona hepática.

Dieta para el hígado

Plan alimentario para el hígado

La zona hepática es fundamental para la salud del ser humano, ya que este órgano es el encargado de depurar las toxinas del cuerpo. Así es que llevar una dieta saludable y con algunos alimentos que estimulen su buen funcionamiento, es algo que bien vale la pena tener en cuenta.

Dieta para el hígado El hígado es uno de los órganos vitales del ser humano. Es responsable de multitud de funciones del organismo y, además, el encargado de desintoxicar el cuerpo. Por eso mismo, tratarlo como se merece por medio de la alimentación, es algo fundamental.

La lista que te proponemos a continuación es la que se considera desde la medicina como idónea para tener una salud hepática óptima:

Las frutas y verduras en general te vendrán de maravillas. Mucho más si son crudas y ricas en vitaminas A y C.

Los hidratos de carbono consumidos en forma de cereales integrales vendrán muy bien. Asimismo el almidón de vegetales como la patata y el azúcar de las frutas.

Las carnes más recomendadas son los pescados blancos, carne de ave magra. Luego el resto de las carnes. Siempre, preferentemente, a la plancha o al vapor.

Los alimentos ricos en folatos te vendrán de maravillas para tu hígado. Estos son los vegetales de color naranja y también los verdes. La levadura también te vendrá bien.

El aceite de oliva virgen crudo resulta terapéutico para el hígado.

No olvides las infusiones y aquellos remedios caseros para el hígado tradicionales. El cardo mariano es uno de los mejores reguladores del hígado que existen. La alcachofa, la remolacha (betabel, betarraga), el diente de león o el boldo también son habitualmente recomendados como protectores hepáticos y estimuladores biliares.

Dos cosas interesantes para ayudarnos cada día a depurar el hígado

Llegó el otoño y también uno de los mejores momentos para vaciar el hígado de sus residuos junto con la primavera y su fuerza ascendente. Ahora tenemos la misma fuerza en sentido inverso, y por eso podemos aprovechar para sacar todo lo que tengamos alojado en el órgano de la purificación orgánica y emocional: el hígado. The Liver es el gran depurador y de paso nos da la vida. Os recomiendo dos cosas muy breves:

1ª.- Desayunad TOSTADAS CON ACEITE DE OLIVA (y con tomate también si queréis), y os estarés ayudando a limpiar un poco cada día el hígado. Si éste órgano fundamental para la salud no recibe cada día el estímulo de la grasa ¡no se autolimpia! Por eso las dietas hipocalóricas provocan piedras e insuficiencia del mismo.

Todo está pensado en la naturaleza, veréis, cada vez que la grasa entra al duodeno el hígado suelta su bilis y con ello también las sustancias excrementicias que la acompañan, y que son producto de su depuración metabólica. Sí, la liberación de bilis conlleva liberación de tóxicos del hígado.

Por eso hay que estimularlo cada día con grasas (animales o vegetales) para activar su autovaciado y su autolimpieza. Lo mejor, por la mañana con una o dos cucharadas de aceite, lo qué llamé minilimpiezas hepáticas, pero éste otro modo de tomar las cucharadas de aceite es con pan tostado. ¡Está buenísimo! y de paso favorecemos su limpieza cada día, poco a poco. Un desayuno sano y depurativo, para empezar el día sin congestiones de bilis...

2ª.- Otra cosa que os recomiendo son las flexiones de tronco cada día, mejor antes de las comidas, ¿por qué? Pues porque al realizarlas diariamente ejercemos una compresión-vaciado sobre este órgano que es como una esponja.

Las flexiones le hacen mucho bien, y es el mejor masaje que podemos brindarle porque ayuda a limpiarlo cada día (y te fortalece los músculos al mismo tiempo). Los estiramientos del yoga favorecen mucho a los tendones (muy relacionados con el hígado) pero quizá lo mejor para éste sean las flexiones de tronco, las abdominales, y también de pie. ¿Cuántas? las que puedas, 20-30-40. Irán en incremento según os ejercitéis.