Impunidad y migración forzada

Este 19 de enero se cumplieron 13 años de la desaparición de Oscar Antonio López Enamorado en el estado de Jalisco. Desde entonces, su madre Ana Enamorado no ha dejado de buscar.

Para hacerlo dejó Honduras, el país que la vio nacer a ella y a Oscar, mismo país del que no obtuvo respuesta a sus primeros llamados de justicia.

Desde entonces ha tocado la puerta de diversas instancias exigiendo a las autoridades mexicanas que busquen a su hijo y demandando verdad y justicia.

El gobierno mexicano no solo no garantizó la integridad de Oscar cuando fue víctima de desaparición, sino que ha demostrado su incapacidad de cumplir con la obligación de dar con su paradero, así como de identificar y sancionar a los responsables de su desaparición.

A trece años, el Estado mexicano genera un agravio más en perjuicio de Ana y de Oscar, ya que es incapaz de brindarle seguridad a ella, la persona más interesada en encontrarle. Desde junio de 2022 Ana Enamorado ha sufrido agresiones ligadas a las labores de búsqueda de su hijo y de otras personas migrantes desaparecidas en México.

La lucha de Ana por encontrar a Oscar ha sido un faro para otras familias que también buscan a un ser querido desde otros países. Así, este caminar se ha convertido ya en un referente internacional.

Como sabemos, los hostigamientos, amenazas y agresiones a luchadoras sociales generan impactos físicos y emocionales que tienen la finalidad de obligarlas a abandonar su lucha.

Los asesinatos de mujeres buscadoras cometidos en México en los últimos meses permiten entender que ninguna amenaza, ni ninguna alerta debe ser pasada por alto.

Por ello, ante hechos de persecución y hostigamiento Ana Enamorado solicitó su incorporación al Mecanismo de Defensores de Derechos

Humanos y Periodistas, dependiente de la Secretaría de Gobernación.

A la fecha el mecanismo no ha establecido -cómo estaba obligado- una evaluación y ajuste de las medidas para asegurar su

integridad, frente a lo cual Ana Enamorado ha tenido que desplazarse de manera forzada fuera de México.

Ana Enamorado había logrado ejercer el derecho que persiguen miles de madres centroamericanas: buscar en terreno a su hijo. Su salida forzada del país afecta directamente el derecho de Oscar a ser buscado y el derecho de Ana a hacerlo.

Quienes suscribimos, exigimos al Estado mexicano que garantice las acciones efectivas que permitan encontrar a Oscar Antonio López Enamorado, y que garantice la vida e integridad de su madre, Ana Enamorado, así como la de miles de madres y familiares que también buscan a sus seres queridos desaparecidos.

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