*Urge corregir las exenciones a la clase alta
Estamos dispuestos a empujar una iniciativa que permita establecer candados para aminorar la corrupción y la satisfacción de intereses particulares, pues el actual dictamen no impone los lineamientos necesarios para evitar que los titulares del Ejecutivo estatal y municipal se endeuden al final de su mandato.
La iniciativa establece que se deberá entregar trimestralmente un avance del informe del resultado de la revisión de la Cuenta Pública a la Cámara de Diputados, teniendo como fecha límite de entrega del informe final el 20 de febrero del año siguiente al de su presentación.
El actual régimen ha permitido casos como el de Andrés Granier Melo, ex gobernador de Tabasco, quien solicitó al Congreso del estado, a 40 días de concluir su administración, contratar deuda pública por 4 mil 130 millones de pesos.
Este régimen funciona como un sistema que permite a las empresas a través de requisitos impuestos en la Ley del ISR, la aplicación de manera inmediata de las pérdidas fiscales que se generen en un ejercicio y el diferimiento del pago de ISR sobre dividendos pagados.
México carece de un sistema de impuestos que refleje la brecha de desigualdad social existente y por el contrario, se continúa con el régimen de consolidación fiscal, sin corregirse las exenciones a la clase alta.
Por lo anterior es necesario realizar cambios a los lineamientos de fiscalización superior de la federación, ya que de no hacerse así, se seguirá incrementándose la desigualdad, el rezago, la pobreza y la marginación en la que viven millones de mexicanos.
Sin los cambios planteados, permanecerá en el país una cúpula de poder corrupta, impune y opaca, beneficiada por la falta de celeridad que el marco vigente le ofrece.
De ser aprobada la iniciativa, se reformaría el artículo 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.