*Urge proteger del crimen organizado a infantes

En el país no existe cifra exacta sobre el número de menores que han sido víctimas del crimen organizado, pues muchos de ellos han sido reclutados por grupos fuera de la Ley o han sido secuestrados y asesinados a consecuencia de la violencia suscitada en el país por la disputa entre bandas del narcotráfico y la lucha del gobierno para combatirlas.

Frente a esta situación, la diputada Lucila Garfias Gutiérrez urgió a atender el llamado de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para que se establezca como delito el reclutamiento de menores por parte del crimen organizado, así como implementar medidas conjuntas para evitar que los niños sean cooptados por grupos delincuenciales y víctimas en los operativos de las fuerzas de seguridad.

No podemos ser omisos ante los señalamientos que hizo hace unos días el Comité de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Niños; tenemos que reconocer que hace falta mucho por hacer para garantizar el pleno respeto de las garantías de los menores en nuestro país.

Los legisladores tenemos que trabajar conjuntamente con los tres niveles de gobierno por robustecer la ley, imponer penas y sanciones más severas para quienes recluten a infantes para fines belicosos, e implementar mayores mecanismos de protección y justicia para niños y jóvenes que han sido víctimas del crimen.

Debemos velar por brindar las mayores oportunidades de desarrollo y bienestar de la niñez mexicana, pues es de reconocerse que muchos de los menores que forman parte de las filas del crimen organizado lo hacen por voluntad propia ante las condiciones económicas en las que viven o diversos factores negativos dentro del hogar que influyen para salir de éste.

Frente a las diversas cifras que presentan organizaciones como la REDIM, que registra de 20 a 30 mil menores reclutados; Cauce Ciudadano que habla de más de 75 mil; y registros periodísticos que hablan de más de 25 mil, es necesario que el gobierno federal realice un estudio para saber acerca del número de la población infantil ha sido víctima del crimen organizado.