*Juicios orales no son la panacea
A pesar de los avances del nuevo sistema de justicia penal acusatorio, el cual incluye los juicios orales, éste no será la panacea para México.
Alrededor de su implementación, hay una serie de actitudes que tienen que ver con la ética, con la responsabilidad de los servidores públicos, con su forma de conducirse o con la nuestra, y esa parte es una responsabilidad que tenemos todos en este sistema y en el resto de los ordenamientos jurídicos mexicanos.
Sin embargo, considero que la nueva modalidad abre una nueva era en la impartición de justicia, principalmente porque se agrega la transparencia como un valor dentro del mismo, lo cual “es parte de la transformación que se requiere en el país.
Las últimas legislaturas del Congreso de la Unión, y particularmente ésta, han tratado de realizar una transformación completa del sistema jurídico mexicano, positiva. Los temas de anticorrupción, transparencia, económicos y sistema de justicia penal, llevan una visión integral, presente en el gobierno federal.
La nueva impartición de justicia penal, y en especial la puesta en marcha de los juicios orales, ayudarán a evitar que se repitan casos como el de José Antonio Zúñiga Rodríguez, quien fue encarcelado por un supuesto homicidio calificado y puesto en libertad al demostrarse su inocencia, lo cual fue relatado a través del documental “Presunto Culpable”.
Justo este caso emblemático señala la diferencia entre el sistema que dejamos y el que se va a implementar en el país próximamente. Los puntos más importante son la transparencia, la inmediatez del juez, la posibilidad de que el juicio se lleve frente al acusado y que esté ahí quien va a resolver.
En el nuevo sistema estará garantizada la presunción de inocencia, ya que durante todo el procedimiento judicial cada persona será considerada como inocente y estará fuera de la cárcel, hasta que una sentencia ordene lo contrario.
Quienes estén acusados de delitos graves o delincuencia organizada, estarán en prisión preventiva mientras dure el proceso penal.