*Ley de Seguridad Pública del DF
La historia registra que el gran legislador para el Distrito Federal ha sido el Congreso de la Unión, sin embargo los ciclos se cierran para transitar a otros, me refiero a la importancia que tiene la reforma política para esta entidad, por la trascendencia que representa.
Hoy la Comisión de Seguridad Pública de esta colegisladora presenta para su votación y eventual aprobación el Proyecto de Decreto por el que se expide la Ley de Seguridad Pública del Distrito Federal.
La expresión legislativa señalada viene a imprimir certeza jurídica a la actuación de los cuerpos del orden de la capital del país, esta afirmación encuentra sustento a la luz de la reforma constitucional de junio 2008, donde se dio un cambio fundamental al sistema de impartición y procuración de justicia que originó la implementación del Juicio Oral y Adversarial.
Se reconoce en el proyecto de ley, entre otras virtudes, que la operación de las instituciones de seguridad pública de la Ciudad de México se regirá por la disciplina de cuerpo y los principios constitucionales de legalidad, objetividad, eficiencia, profesionalismo, honradez, y sobre todo, respeto a los derechos humanos.
Ante ese contexto se exige un papel más profesional en su delicada labor de los elementos de seguridad pública, porque ahora se demanda un cuerpo técnico y especializado, en donde la policía juega un gran papel en la investigación de los hechos delictivos, sobre todo:
-En cuanto a la escena del crimen y del hallazgo.
-En el proceso de resguardo de la denominada “Cadena de Custodia”.
-Y en la elaboración del Informe Policial Homologado.
Indicios que si no son bien manejados y presentados de manera correcta ante el juzgador, podría dar lugar a la impunidad, porque éste no tendría más remedio que dejar en libertad al justiciable, consecuentemente, se quebranta el Estado Democrático de Derecho.
Vemos con interés, que el producto legislativo de mérito, consigna que esas mismas instituciones tendrán como obligación elaborar programas de protección a los derechos de los niños, niñas y adolescentes, que atiendan en todo momento al principio del interés superior de la niñez, porque recordemos, que este sector además de ser uno de los más vulnerables, representa el futuro inmediato de México.