*Francia y México: unidas para prosperar
La relación entre Francia y México se sustenta en una amistad de cerca de 200 años, marcada por la estima y el respeto mutuos. Esta Visita de Estado a Francia representa una gran distinción para México: se trata de la primera vez en que un país latinoamericano es el invitado de honor en el desfile militar del Día Nacional de Francia. Se trata también de una excelente oportunidad para que Francia y México estrechen aún más sus vínculos y sigan fortaleciendo su cooperación, a partir de iniciativas y proyectos concretos en distintos ámbitos.
Hace dos años quedó instalado el Consejo Estratégico Franco-Mexicano, como un espacio privilegiado de diálogo de alto nivel entre empresarios, académicos, políticos y diplomáticos. Ahora, durante esta visita, el Presidente Hollande y yo recibiremos su segundo informe. Estoy seguro de que ese ejercicio de visión compartida, orientará las siguientes acciones a emprender, para que el renovado acercamiento bilateral siga siendo tan fructífero como en los últimos dos años.
Ambos países también han trabajado en conjunto a favor de los intercambios económicos recíprocos. Ejemplo de ello, es que más de 1,600 empresas con capital francés se han instalado en México. Estas compañías valoran y aprovechan que somos una plataforma productiva de alcance global, con una privilegiada ubicación geográfica y creciente infraestructura logística. También, somos un país estable y confiable, que a lo largo de ocho décadas ha construido instituciones democráticas y que hoy goza de sólidos fundamentos macroeconómicos. México es una economía abierta, competitiva y en ascenso. Nuestra red de 11 acuerdos comerciales con 46 naciones y el creciente flujo de inversiones y nuevas tecnologías, aunado a nuestra población joven, talentosa y preparada, consolidan nuestro potencial productivo. Para aprovechar todas estas fortalezas y ventajas, México se está transformando a partir de una amplia agenda reformadora, que abre nuevas oportunidades en sectores estratégicos, como el de las telecomunicaciones y el energético.
Ejemplo de nuestra complementariedad es la creciente industria aeroespacial mexicana, que cuenta con una importante presencia de compañías francesas. El año pasado, en la ciudad mexicana de Querétaro, el Presidente Hollande nos acompañó en la inauguración del Campus Aeronáutico Franco-Mexicano, dedicado a la investigación científica, desarrollo e innovación. El sector es cada vez más competitivo y, sin duda, un claro ejemplo de cómo franceses y mexicanos podemos colaborar con éxito.
Francia y México seguiremos trabajando intensamente, como hasta ahora, para profundizar esta relación de amistad, cooperación y crecimiento compartido, en beneficio de nuestras sociedades. Confío en que esta Visita de Estado a Francia traerá beneficios concretos, que se traducirán en oportunidades de desarrollo, crecimiento económico y empleo para franceses y mexicanos.