*La Armada de México es bastión de la libertad

La Armada de México es bastión de la libertad, la independencia, la seguridad y la soberanía nacionales.

La Marina es una noble institución, formada por mujeres y hombres de bien, dispuestos a servir a la Patria con todo su ser y en cualquier circunstancia.

Ejemplo de ello, son los guardiamarinas de la generación 2010-2015.

Como Presidente de la República y Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas, es un honor acompañarlos en esta emotiva Ceremonia de Graduación.

A cada uno de los recién egresados, los felicito por su disciplina, estudio y perseverancia.

Sé que fueron años demandantes, de duras pruebas, que les exigieron dar lo mejor de sí, dentro y fuera de las aulas.

Este día, cumplen con una meta, pero al mismo tiempo inician un nuevo camino, que les deseo sea de éxito personal y arduo trabajo en favor de México.

Felicidades a todos ustedes, a sus maestros y directivos, a sus padres y familiares, quienes los acompañaron y alentaron en esta importante etapa de su vida.

Este día, no sólo dejan de ser cadetes, para convertirse en guardiamarinas. En esta fecha también reciben la elevada misión de servir al país, de servir a México desde las filas de la Armada de México.

Asuman este compromiso con honor y lealtad inquebrantables. Que su Sable de Mando, además de ser símbolo de autoridad naval, sea un permanente recordatorio de que han decidido entregar su vida a la protección y defensa de la Patria.

En sus diversos centros de educación naval, la Secretaría de Marina ofrece a los jóvenes mexicanos, de todos los niveles socioeconómicos, la oportunidad invaluable de recibir una formación de calidad.

Es una preparación integral, que conjuga los más altos valores y principios, con las aptitudes y conocimientos especializados que exige la Armada de México.

Para consolidar los altos estándares que rigen a la educación naval para contar con una institución emblemática, ejemplo de profesionalismo y sofisticación operativa, que caracterizan a la Marina, hoy se ha creado la Universidad Naval.

Este día se ha publicado en el Diario Oficial de la Federación el Decreto que crea esta nueva institución, que prestará servicios educativos a nivel técnico, técnico profesional, profesional y de posgrado.

Esta universidad, producto de la meticulosa reingeniería del Sistema Educativo Naval, estará conformada por cinco escuelas de posgrado, entre ellas, el Centro de Estudios Superiores Navales, tres escuelas de formación profesional, incluyendo este heroico plantel; cuatro escuelas de formación técnica y 10 centros de capacitación de la Secretaría de Marina.

Como parte del Programa Sectorial de Marina 2013-2018, la Universidad Naval reforzará la enseñanza técnica y especializada que reciben los marinos para hacer frente a los altos encargos que la Nación demanda de ellos todos los días.

Además, le he dado la encomienda de impulsar, como lo han hecho hasta ahora, la investigación e innovación científica y tecnológica; acciones que, sin duda, contribuirán al fortalecimiento de la seguridad nacional.

En el modelo educativo naval del Siglo XXI, es crucial que los marinos de México estén cada día mejor preparados y con los instrumentos idóneos para cumplir sus misiones; es decir, que cuenten con una formación naval, científica, tecnológica, humanista y ciudadana de alto nivel.

Queremos fortalecer el poder naval de la Federación. Desde la preparación misma de los cadetes, procurando que reciban una educación de excelencia a la altura de las mejores del mundo.

Al fortalecer con mejor educación a la Secretaría de Marina, fortalecemos a México.

Con la creación de la Universidad Naval, la Armada de México se suma con decisión al objetivo primordial de la Reforma Educativa: el de brindar educación de calidad a los jóvenes de México.

En este marco, reconozco la labor que han emprendido nuestras Fuerzas Armadas en favor de la enseñanza, al actualizar y ampliar las capacidades de sus propias instituciones educativas.

Agradezco y reconozco su compromiso con este gran esfuerzo de transformación nacional, que es por el bien de las futuras generaciones.

Señoras y señores:

Todos los días, nuestras Fuerzas Armadas reafirman su lealtad a México.

Todos los días, miles de marinos y soldados arriesgan su propia vida para proteger la vida de sus compatriotas.

Nuestras Fuerzas Armadas surgen del pueblo, para servir al pueblo.

Como su Comandante Supremo, me siento muy orgulloso de nuestras instituciones militares.

Siempre será ocasión propicia para reconocerles y agradecerles su invaluable servicio a la Patria.

A los nuevos oficiales:

Les ordeno desempeñarse con estricto apego a la ley, con absoluto respeto a los derechos humanos y bajo los principios de honor, deber, lealtad y patriotismo.

Que así sea por el bien de nuestras Fuerzas Armadas, y que así sea por el bien de todo México.