Ofrece senadora priísta vergonzante listado con que el mundo etiqueta al México corrupto

La senadora Graciela Ortiz González ofreció desde la tribuna de la Comisión Permanente un listado de cifras con que el mundo ve a México en materia de corrupción, lo que nos ubica en los primerísimos lugares de las competencias de la vergüenza. Aquí sus palabras textuales:

COLUMNA DEL SENADO: Graciela Ortiz González

 

*La corrupción nos alcanza a todos en el país

Algunas de las cifras que se han difundido sobre México en materia de corrupción, nos obliga a ver el tema con esa seriedad, con ese compromiso, con ese deseo de verdaderamente resolver las cosas, más allá de lanzar un lodo circunstancial y acusaciones generalizadas.

En el Observatorio Económico de México, ¿cómo vamos? Hay la aseveración de que la corrupción genera una pérdida económica equivalente al 2 por ciento del Producto Interno Bruto Nacional, monto que asciende a los 341 mil millones de pesos. Eso nos habla de una visión.

El Banco Mundial, por su parte, dice que los costos de la corrupción en México representan el 9 por ciento del Producto Interno Bruto Nacional, es decir, 1.5 billones de pesos anuales.

Y la Asociación Mexicana de Estudios para la Defensa del Consumidor, calcula 120 mil millones de dólares de pérdidas por la corrupción, lo que representa casi el 20 por ciento del Producto Interno Bruto Nacional.

Y de eso estamos hablando, y eso lo vemos en las cifras macro, veamos cómo le afecta a la familia mexicana, a esa familia a la que representamos y que deben ser el sustento y el motor de nuestra actividad aquí en el Senado mexicano.

Dice Transparencia Mexicana que los hogares mexicanos destinan 32 mil millones de pesos cada año a la corrupción, las familias llegan a ocupar hasta el 14 por ciento de sus ingresos al pago de mordidas con un costo promedio, cada una, de 165 pesos.

Si nos damos cuenta que hay familias en muchas partes del país que solamente tienen como ingreso un salario mínimo, pues vamos a entender lo que significa para esos hogares asignarle parte de su recurso y de su ingreso.

Eso significa la afectación que sufre el salario mínimo de esas familias.

La corrupción es un problema nacional de grandes proporciones; un problema que pareciera estar circunscrito solamente a la clase política nacional; un problema que debiera de preocuparnos, más allá de los ejemplos que aquí se dieron, debiera de preocuparnos porque nos alcanza a todos.

Hay quien en una condición de asumirse como la conciencia moral de este Senado, habla de la necesidad de que generacionalmente atendamos el tema; no, el tema nos alcanza a todos y nos debe de preocupar a todos.