*Todos los partidos buscan burlar la ley electoral
Se dice que las leyes se crean cuando se desconfía de los instintos, eso es verdad. La sociedad seguramente se preguntará cuáles son los alcances de esta reforma político electoral, que gana la sociedad es una pregunta lógica que parte de la exigencia a quienes hacemos leyes.
El bien tutelado es la democracia es lo que nos ha llevado a hacer y rehacer las diversas leyes electorales que hemos tenido en la historia sin encontrar hasta el momento una ley que garantice el respeto pleno a la voluntad ciudadana. Esa deuda la tenemos.
No podemos negar tampoco que se ha avanzado en las últimas dos décadas en esta materia, es verdad, pero no podemos estar satisfechos con lo logrado.
Cada reforma electoral ha sido puesta a prueba y en cada una se ha buscado como burlarla y hablo de todos los partidos políticos.
Unos con mayor ahínco y recursos económicos, otros con menos, pero todos han buscado la forma de burlarla. Hemos llegado a ver extremos de violación de tergiversación de la norma electoral que nos han hecho perder la capacidad de asombro.
Por eso es que ante la pregunta de: ¿qué gana la sociedad con estas leyes secundarias político-electorales?, no podemos dar aún una respuesta precisa. Porque esta reforma estará de nueva cuenta a prueba. Seguro que habrá quien busque cómo burlarla.
Pero lo que sí podemos asegurar, es que definitivamente será más difícil hacer esta burla de esta legislación.
Será más difícil que un partido o candidato tome ventaja sobre los otros; será más difícil que los medios de comunicación puedan hacer candidatos; será más difícil que se compre el voto abusando de la necesidad de la gente.
Será más difícil que sea el dinero quien marque la diferencia entre las contiendas.
Las ganancias ilegales de los medios de comunicación --todos-- electrónicos y escritos serán más difíciles de obtener.
En esta reforma por supuesto que hay cuestiones de mucha avanzada; el prorrateo de los gastos de las campañas, el nuevo programa especial sancionador.
El establecer transparencia y claridad en el financiamiento privado; la paridad de género en las candidaturas; el voto del Senado en el extranjero; la atracción parcial de los procesos locales; las candidaturas independientes; la nulidad por el dolo y gravedad con que se cometa una violación a esta legislación.
El recuento de votos, el modelo de comunicación que aunque no nos dejó satisfechos por lo menos no hubo retrocesos; el que existan debates obligados para que la sociedad tenga plena conciencia de por quién votar son algunos de estos logros.
Estas nuevas leyes, esta Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales y la Ley General de Partidos Políticos están a prueba, entonces mucho depende de la voluntad democrática de los partidos y de la exigencia de la sociedad.