*Sospechosa posición de PEMEX
Extraña la disculpa anticipada de Petróleo Mexicanos al desligarse de las consecuencias en las operaciones fraudulentas de Oceanografía.
Petróleos Mexicanos contradice lo manifestado por la PGR y el SAE, quienes afirmaron que mantuvieron la operación de los contratos de Oceanografía para no afectarlos, así como las fuentes de trabajo de 11,000 trabajadores y la operación con Pemex por considerarla como una empresa prioritaria.
Recuérdese que el director de Pemex Exploración y Producción, Gustavo Hernández dio a conocer que la afectación que tuvo Pemex por el caso de Oceanografía y la intervención de PGR y el SAE, dio como resultado la pérdida de producción diaria de 80,000 barriles de petróleo, equivalente a cien millones de pesos diarios, esto sin contabilizar las penas por contratos internacionales a Petróleos Mexicanos derivado de la reducción diaria en las entregas.
El director general de Pemex, Emilio Lozoya, confirmó que repartió los contratos que tenía Oceanografía -mismos que se pudieron rescindir-, y se le aplicaron las penas y multas correspondientes, cuando incluso Amado Yáñez se encontraba en el extranjero y la empresa abandonada con una larga fila de trabajadores y acreedores en la puerta.
Entonces, ¿cómo es que Pemex pudo ubicarlo para cobrar las fianzas y multas?
Basta con recordar el caso del barco OSA GOLIATH, el más grande del mundo en su tipo, contratado por PEMEX para trabajos específicos, mismo que no tiene remplazo, barco que estaba intervenido por la PGR en el momento en que salió de aguas nacionales, dejando tirados los contratos, incluso llevándose abordo tubería y petróleo propiedad de PEMEX por varios cientos de millones de dólares; esas son pérdidas para la petrolera.
Es claro que las multas y penas de los contratos que refiere el director general no fueron pagadas; primero porque se amparó Oceanografía y después porque el SAE en una afrenta al patrimonio de PEMEX solicitó al juez del concurso mercantil que se le devolvieran y que Petróleos Mexicanos se abstuviera de ejercer procedimientos de cobro; prácticamente quedó en estado de indefensión, adicional a que por orden del juez concursal se levantó la inhabilitación impuesta por PEMEX, lo que le permitió a Oceanografía obtener más contratos y créditos.
Por ello es necesario que explique el director de Pemex, Emilio Lozoya, si es cierto que repartió los contratos como lo afirma y en qué forma lo hizo, si fue a través de la Ley de Adquisiciones o Concurso Internacional, ¿en qué momento realizó esta acción?
“Entonces, nos preguntamos ¿cuáles serían los contratos que Miguel Alemán quería operar, al pretender comprar Oceanografía si ya estaban repartidos?
Es importante que estas asignaciones o licitaciones se trasparenten porque este caso sigue en investigación.
El juez de lo concursal a petición del SAE dejó operando a Oceanografía con todos los contratos vigentes, por ello es importante que digan cuáles serían estos.
Pemex no puede deslindarse ni dejar ser coadyuvante en el proceso penal que se le sigue a Amado Yáñez.