Versiones que salen de la oficina de Comunicación Social de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, como ya se está haciendo costumbre, aseguran que “la jefa ordena y se debe cumplir”…
Esto en referencia a los sueldos que se están descontando a los asambleístas del PAN y del PRI en forma por demás arbitraria, lo que ha provocado escandalosas protestas de los afectados… Es el caso del diputado local azul Rafael Calderón Jiménez, a quien le descontaron los casi 60 mil pesos por una falta de asistencia que, según afirma, nunca ocurrió… Pero como la protesta crece, la perredista Alejandra Barrales Magdaleno, mandamás en la ALDF, ordenó a sus incondicionales que “péguenle a donde más duele, en la bolsa y me vale madres que se quejen con quien se quejen”… ¿Queeeeeeeeeee tal?