En abril pasado el Pleno de la ALDF aprobó un exhorto al Secretario de Seguridad Pública, Manuel Mondragón y Kalb para pedirle se retire de la vía pública los vehículos convertidos en chatarra, abandonados en la vía pública, pues se ha convertido en guarida de maleantes y focos de proliferación de fauna nociva.
De inmediato la dependencia del gobierno local, a través de su Dirección de Tránsito. Dispuso que dentro del marco de la ley, levantar los despojos de lo que alguna vez fue un auto, trasladarlo con grúa o en camioneta de plataforma a los depósitos de la Secretaría y si estos no son reclamados por sus propietarios se procede a la trituración y dejarlos en pacas metálicas.
En el caso de que un vehículo estacionado por más de 2 meses fuera de algún domicilio, en evidente deterioro, sea enganchado para su arrastre y el dueño compruebe su propiedad, se le permitirá conservarlo con la advertencia que de continuar más días ahí, será trasladado al depósito y se le devolverá para su compostura y rehabilitación.
Cifras de la SSP capitalina señalan que en las calles de la Ciudad se ubican aproximadamente 20 mil automóviles abandonados, siendo las delegaciones políticas con el mayor número de chatarra inservible Gustavo A. Madero, Iztapalapa, Venustiano Carranza, Azcapotzalco, Miguel Hidalgo y Cuauhtémoc, situación que convierte a estas unidades como guarida y refugio de drogadictos, niños de la calle, alcohólicos, refugio de perros y fauna nociva, además de basureros clandestinos.
La ALDF exigió que en coordinación con la Dirección de Tránsito, las 16 jefaturas delegacionales, apegados a Derecho y respetando la propiedad privada, levanten las carrocerías abandonadas, en beneficio de los vecinos, transeúntes y niños que juegan cerca de esas armazones deterioradas.