La labor a favor de la ciudadanía no debe escatimarse, minimizarse u omitirse pues ella es la razón del trabajo público, legislativo y administrativo del GDF y la Asamblea Legislativa, lamentablemente algunos servidores públicos de primer nivel y delegacionales.

No han cumplido con su responsabilidad dañando los intereses y la calidad de vida a los vecinos.

Es por ello, que desde la Tribuna de la Diputación Permanente, la Presidenta de la Comisión de Participación Ciudadana, Lizbeth Rosas Montero, acusó y criticó la irresponsable actitud de autoridades que desacataron una orden de la ALDF sobre el ejercicio del Presupuesto Participativo 2011 y la realización, de la autoridad, de auditorías para sancionar tan desastrosa pasividad.

Expuso que dentro de las labores de colaboración que establece la Ley, celebrar –previa autorización del Jefe de Gobierno- convenios de coordinación entre la Asamblea Legislativa y la Contraloría General del DF, se firmó la realización de 16 auditorías a las Delegaciones Políticas para detectar los motivos por los que algunas no ejercieron en su totalidad el presupuesto asignado, según acuerdo con los Comités Ciudadanos, sin embargo, a menos de un mes de concluir los trabajos de la V Legislatura, esta  dependencia no cumplió su responsabilidad.

Desde el foro político más importante de la Ciudad de México, la diputada insistió que ahora, irresponsablemente,  no solo existe incumplimiento de algunos servidores públicos delegacionales, sino que la actitud y la displicencia que ha mostrado la propia Contraloría General del Distrito Federal, está ocasionando que, en la ciudadanía en general, y en los Comités Ciudadanos, en particular, se perciba el solapamiento, negligencia y opacidad, en el actuar administrativo.

Lo anterior se basa, refutó Rosas Montero, en  que desde enero de 2012 presentó una denuncia -sustentada en oficios y escritos de la ciudadanía- para revisar escrupulosamente el Presupuesto Participativo 2011 y se entregara una respuesta satisfactoria, pero lamentablemente no ha llegado ni a esta Soberanía,  mucho menos a la ciudadanía.

Lo anterior manifiesta incapacidad, negligencia o maldad de la Contraloría General del GDF y de las autoridades delegacionales que no aplicaron y/o ejercieron el Presupuesto Participativo, ignorando con ello a los vecinos; peor aun, apuntó, la Contraloría capitalina no fue capaz de auditar a los omisos y notificarlo a Asamblea Legislativa para ordenar a la autoridad competente sancione a los Jefes Delegacionales por su lamentable actitud.

La titular de la Comisión de Participación Ciudadana, reiteró su exhorto al Contralor García Sainz a enviar el resultado de las auditorías “realizadas”, aunque sea a destiempo.