Un grupo de integrantes del Comité Ciudadano de Defensa de los Naturalizados y Afromexicanos, en huelga de hambre desde el 4 de julio para protestar la falta de respuesta al asesinato a sangre fría de Malcolm Latif Shabazz, nieto de Malcolm X, en la Plaza Garibaldi de la Ciudad de México hace dos meses, fue reprimido por fuerzas de la policía local la tarde del jueves 11 de julio en la entrada de las oficinas del Gobierno del Distrito Federal.

En el lugar también se encontraba la madre del estudiante Carlos Sinhué, asesinado en la UNAM, y estudiantes quienes la acompañaban.

El grupo de estudiantes se encontraba manifestándose de manera pacífica en pleno uso de su derecho a la libre expresión por la libertad de su compañero Mario González y también por el esclarecimiento del asesinato de Malcolm Latif nieto de Malcolm X.

La llegada de los estudiantes frente a las oficinas del Gobierno Distrito Federal ocasionó que entre 400 y 500 granaderos arribaron al lugar. En el transcurso de una maniobra para poder encarar a los estudiantes, los huelguistas fueron cercados con lujo de violencia por los ganaderos y luego  ocuparon el espacio en donde estaban los participantes en la huelga de hambre.

Pisaron las fotos de Malcolm Latif  Shabazz que eran parte de una ofrenda y empujaron al presidente del comité Sr Wilner Metelus para, en los hechos, desalojarlo y poner fin a la huelga de hambre.  También empujaron a una pareja y a su hijo de cuatro años.

Tanto del Gobierno del distrito Federal como ciertos medios se han empeñado en etiquetar a estos estudiantes como del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) de la UNAM, cosa que no tendría nada de malo pero que, en este contexto, tiene la intención de desprestigiar a los luchadores sociales.

Cabe mencionar que dos horas antes del incidente, personal de vigilancia de las instalaciones del Gobierno del Distrito Federal  repentinamente negó a los huelguistas el acceso a los baños y a las conexiones eléctricas, cosa que parece indicar que la represión fue planeada.

En las horas anteriores a la represión policiaca, ninguna autoridad del Gobierno del Distrito Federal intentó establecer contacto con el Comité.

“La muerte de Malcolm Latif Shabazz fur una tragedia no solamente para su familia y también para todos seres humanos en el planeta porque su abuelo, quien fue uno de los grandes defensores de derechos humanos, del siglo pasado, que ha dado su vida por la humanidad. Hacemos responsable de toda esta violencia al jefe del gobierno Miguel Ángel Mancera.

“Exigimos castigos por esta represión, nuestro movimiento es pacífico. Reafirmamos nuestras demandas: 1)  presentación pública del video de la Seguridad Pública de la calle en donde ocurrieron los hechos.

2) Detención de los demás sospechosos que el procurador Rodolfo Ríos admite que siguen libres.

“Pedimos que todos nuestros hermanos mexicanos y extranjeros nos apoyen en esta lucha”, expresaron los protestantes.