Vecinos de la delegación Magdalena Contreras intentaron que TV Azteca difundiera una inconformidad vecinal y la empresa les respondió que “no podemos publicar eso y mejor ni se meten ahí”.

Cruz Erlyn López Rivas y Rogelio Andrés Ayala Aguirre, aseguraron que en esta demarcación hay hartazgo, corrupción e impunidad, porque INVEA y SEDUVI protegen a los poderosos y sus ilegalidades en la construcción de inmuebles y cambios de uso de suelo.

Revelaron que hace días pidieron ayuda a Jorge Garralda –conductor del programa “No se deje” de TV Azteca-, pero este personaje se limitó a decirles que no podía dar esa noticia y que mejor “no se metan”.

Por ello señalaron que tienen temor de la delegada Leticia Quesada y de los funcionarios del GDF por lo que han expuesto y los responsabilizan de cualquier “accidente” que pudieran tener. Hicieron un llamado a Miguel Ángel Mancera, Jefe de Gobierno capitalino para que interceda.

Ayala Aguirre explico que en diciembre pasado interceptaron a la delegada Quezada, debido a que no los quiso recibir a pesar de múltiples solicitudes de citas, y que al ver la manifestación, bajó de su lujoso auto y les dio: “estos desgraciados no se la van a acabar, les voy a partir la madre”.

De inmediato, dijo el quejoso, un servidor de la delegada los amenazó con meterlos a la cárcel. Pero a raíz de esto, indicó que les dio audiencia Quezada el lunes 17 de diciembre, sólo para decirles que había “checado con lupa” la documentación del expediente de la obra en discusión y que no había ninguna irregularidad, y que mejor no siguieran adelante porque solo estaban perdiendo su tiempo.

Pero, con el apoyo de trabajadores que portan chalecos del Gobierno del Distrito Federal, se han continuado las obras, a pesar de que desde el inicio los habitantes de la colonia solicitaron la suspensión debido a los posibles daños estructurales que podrían sufrir sus viviendas.

Puntualizaron los vecinos que han recibido amenazas por parte de personal de la delegada en Magdalena Contreras, Leticia Quezada Contreras y, que ésta última avaló la obra no obstante que en la página de Internet de la compañía constructora (arqos-promotora), se anuncian las características de los departamentos que claramente contravienen los principios de la norma 26.